Cosas vergonzosas que te pasaron la primera vez que te bajó

Parece que el hecho de que te haya bajado por primera vez no es suficiente, los malditos cólicos se hacen presentes, el cuerpo te duele como si te hubieran atropellado y tu humor está peor que cuando el diablo se pone de malas. Todas estas cosas te llegan juntas como si de un “combo” se tratara.

¿Por qué Dios? ¿Qué te he hecho?

Decírselo a tu madre.

No sé si estamos programadas genéticamente, pero en cuanto nos baja por primera vez lo primero que hacemos es gritar: “¡Mamá!” Ella viene corriendo y al enterarse se emociona como si se hubiera ganado la lotería,. Tú sólo quieres que baje el volumen de su voz y que no se lo diga a nadie.

Tu madre se lo comunica al mundo entero.

Aunque tú quieres que guarde el secreto, obviamente ella se lo va a decir a todo el mundo, y cuando menos lo esperas la noticia ya ha corrido por toda la familia, colonia y hasta el vaticano. ¿Cuál es el afán por contarle tus intimidades a todo el mundo?

anger girl

Tu padre te ve como si hubieras evolucionado como Pokémon.

Tu padre no se queda atrás, y es que él se está conteniendo las lágrimas a más no poder.  Además te ve distinto, como si fueras un pokémon y hubieras evolucionado. ¡Qué horror!

Ramo de flores incómodo.

No sé si soy a la única que le pasó, pero a primera vez que me bajó mis padres llegaron con un arreglo floral enorme con una nota que decía: Felicidades a nuestra nueva señorita. ¿Por qué festejan? ¡Me siento mal y no es nada agradable!

period

No sabes cómo diablos ponerte una toalla.

Eres nueva en esto y tu madre siente que tienes 30 años con la regla. No tienes ni la más mínima idea de qué lado debes poner esa cosa.  Obvio tienes que dejar que ella te lo explique todo. ¡Demasiado vergonzoso!

Manchones seguros.

Pues sí, no sabes cada cuánto debes cambiar ese incómodo pañal alargado, así que generalmente las primeras veces te lo pones mal y terminas toda manchada. Lo peor es que tu padre te dice: “Hija, creo que estás manchada”. ¡Quiero morir!

ser chica

Todos diciéndote “señorita”.

¿Por qué todo mundo se siente con el derecho de meterse en tu vida justo ese día? No se cansan de decirte que ya eres señorita y de mirarte con ganas de borrego moribundo. ¿Por qué le dan tanta importancia? ¡Ignórenme!

Comprar toallas sin saber qué diablos significan.

A tu madre se le ocurre la brillante idea de mandarte por tus primeras toallas femeninas, pero te manda sin información alguna. Así que llegas y ves 564635 opciones distintas. ¿Cuál escoger? Además sientes que todo mundo se te queda viendo como si supieran que es tu primera vez.

tampones

Paranoia extrema.

Habías escuchado acerca del bajón, pero cuando lo experimentas no hayas ni dónde esconderte para verificar que todo siga normal. Te tienes que aguantar la vergüenza y te la pasas pidiéndole a todos que chequen si estás manchada. No puedes pensar en otra cosa.

Tampones.

Hay mamás que te dicen que no puedes usar un tampón porque te quitará tu virginidad. Así es, las mamás a veces nos desinforman más de lo que ya estamos. Pero si tu mamá no tenía ideas raras, de todos modos no te fue tan bien. La primera vez que te pones un tampón es extraño, algo traumático y sientes que mágicamente ese hilo desaparecerá o se romperá al jalarlo. Es aterrador.