Las mascarillas o cubrebocas se han convertido en el personaje principal de esta ‘nueva normalidad’. No sabemos si se irán o si llegaron para quedarse, pero lo que sí te podemos asegurar es que ya han causado estragos en tu piel.
Si ya estás sufriendo de acné a causa del uso prolongado de estos “accesorios”, entonces necesitas poner manos a la obra para lograr controlarlo y eliminarlo.
Estos tips te ayudarán a lograrlo:
No toques tu rostro
Una de las reglas para frenar esta epidemia es justamente eso, no tocar nuestro rostro con las manos sucias. Bueno, para el acné es lo mismo. No toques los granitos ni con tus manos limpias, no los exprimas.
Mascarillas de algodón
Una de las causas principales del acné por uso prolongado de cubrebocas, es que la piel no respira adecuadamente, esto provoca que bacterias crezcan en la zona y la piel se infecte. Para ayudar un poco a nuestro rostro, trata de usar mascarillas que sean 100% de algodón, los materiales sintéticos afectan directamente a la piel.
Cámbiala durante el día
Si usas cubrebocas la mayor parte del día, trata de cambiarlo al menos una vez. Así alejas la mugre, las toxinas y las bacterias de tu piel.
Lava y humecta tu rostro después de usarla
Cada que cambies el cubrebocas, lava tu rostro con agua tibia y jabón neutro o antibacterial. Huméctalo siempre, la resequedad en la piel también causa acné. Recuerda usar una toalla específica para tu rostro, no uses la misma con la que te bañas o lavas tus manos.
Lávalas diariamente
No uses la misma mascarilla sin antes haberla lavado correctamente. La contaminación y las bacterias en ella te producirán irreversiblemente más y más acné.
Cremas sin alcohol
Trata que tu crema para el rostro sea lo más natural posible y sin alcohol. Porque este ingrediente podría empeorar la situación.
Trata de no usar maquillaje
Si usas maquillaje en esa zona, taparás aún más tu poros, propiciando nuevos brotes.
Hidrolatos para refrescar
Los hidrolatos de lavanda, rosas o geranio son antisépticos naturales. Esto quiere decir que eliminarán bacterias de tu rostro. Además lo mantendrán fresco e hidratado. Rocíalo sobre tu rostro cada que lo laves o quieres refrescarlo por el uso prolongado del cubrebocas. También puedes rociar tu cubrebocas con él para mantenerlo limpio durante el día.