Tener una piel perfecta no es nada fácil, porque no conozco a alguna chica que no rompa una de las prohibiciones básicas, como ir a dormir maquillada o salir sin protector solar ¡Esos son malos hábitos! Pero no se preocupen, porque podemos sustituirlos por nuevos hábitos positivos.
A continuación te dejo una lista de cosas sencillas que puedes hacer por tu piel para que te quede como la de las pompis de los bebés. Créeme que en un año notarás una extrema diferencia en tu tez.
Hábitos diarios:
Lavar tu cara dos veces al día
De preferencia con algún jabón que favorezca tu tipo de cara, una vez en la mañana para que tu piel se prepare a recibir las cremas y maquillaje que te pones diario; y otra en la noche para limpiar las toxinas, las impurezas y la suciedad que acumulaste durante el día.
Desmaquillarte todas las noches
Aunque sólo te hayas puesto rímel o poquito rubor ¡diario y sin peros! Hay que remover todo el maquillaje de tu cara. El maquillaje no sólo obstruye los poros, sino también atrapa la suciedad y la contaminación en la piel, bloqueándolo para la reparación que nuestra piel ocupa mientras tú duermes.
Duerme 8 horas al día
Si eres de las chicas que tiene que madrugar, pues intenta dormirte temprano. Porque durante la noche tu piel se renueva y se beneficia pues no está expuesta a los agentes ambientales como la luz del sol, la contaminación y las temperaturas extremas. Cuando duermes, le permites a tu piel recuperarse de todos los traumas que sufrió durante el día.
Bebe litros y litros de agua
Bueno, quizá exagero con el número, pero dale a tu cuerpo el agua que te va pidiendo durante el día, porque no sólo debes hidratar tu piel por fuera también debes hacerlo por dentro, además te ayudará a reducir los brotes de acné, ya que liberas toxinas durante la hora de hacer pis.
Protector solar
Diario y absolutamente diario debes usar protector solar mínimo de SPF 30. Muchas piensan que sirve para que no te dé cáncer de piel ¡Y sí! Protégete de eso, pero también nos sirve como una tipo barrera que disminuye la aparición de arrugas y que hace que color de piel sea uniforme.
Bañarte con agua templada
Cuando hay días fríos, caemos en la tentación de bañarnos con el agua para pelar pollos o hay chicas que simplemente no pueden bañarse con agua fría ¡Lo mejor es el agua templada! Ayuda a la salud de tu piel, verás la diferencia día con día. También te recomiendo que en lugar de fregarte con la toalla, poco a poco te seques la piel.
Hábitos semanales
Hacer una mascarilla exfoliante en casa
Por lo general debemos exfoliarnos la piel una vez a la semana y máximo tres para eliminar células muertas, pero si piensas que es demasiado gasto o no confías en los químicos, te conviene hacer tu propio exfoliante con cosas tan básicas de tu cocina como hielo, limón, miel, avena, etcétera, sólo es cuestión de buscar recetas.
Hacer ejercicio tres veces a la semana
Te preguntarás un ¿qué tiene que ver la piel con el gym? Primeramente porque tensa tu piel, reduce el estrés (que ocasiona brotes) y porque la comida que necesitas como combustible para el ejercicio como el omega 3 (almendras, nueces, salmón, etc.) previenen la inflamación de tu piel.
Limpiar tus cosas semanalmente
Bueno, por cosas no me refiero a todo, sino a todo lo que toque tu piel, por ejemplo desinfectar tu celular, que siempre tocas y tocan todos y te llevas a la cara cuando te marcan. Lavar tus fundas de almohadas que se llenan de polvo. Y lavar tus brochas de maquillaje que acumulan maquillaje viejo y suciedad.
Exfoliarte todo el cuerpo con azúcar
Es demasiado sencillo, una vez al mes debes combinar azúcar con jugo de limón hasta que quede una textura áspera, entonces masajeas toda piel con el exfoliante, especialmente en zonas muy secas como rodillas o codos. Debes sentir un cosquilleo que quiere decir que se está activando tu circulación. Después enjuágate con agua templada y déjate secar la piel poco a poco.
Hábitos mensuales
Balance de rutina
Un balance de rutina es cambiar los hábitos que estás teniendo dependiendo del mes, si es soleado, lluvioso, frío, etcétera. Por ejemplo, cuando hace calor intenta hacer lo posible por mantener tus poros limpios y tu piel protegida del sol, cuando hace frío intenta buscar humectantes más fuertes para tu piel.
Ir al dermatólogo
Si tienes el tiempo y dinero para ir con un especialista ¿qué estás esperando? Toda piel es diferente y necesitas un tratamiento en específico. Además de que puede ayudarte a recuperar tu tono de piel, eliminar paño y espinillas o incluso cicatrices de años.
Hábitos anuales
Hacer un examen anual de piel
Si vas cada mes al dermatólogo hay cosas que él no puede ayudarte a detectar, como el cáncer de piel, eso debes hacerlo con un dermatólogo certificado porque aunque sientas que eres muy joven el cáncer puede darte a cualquier edad. Incluso tú puedes revisar lunares o manchas sospechosas en las pantorrillas y piernas que son las zonas más propensas al desarrollo de melanoma en las chicas.