Cuando amas con locura a tu pareja, es normal empezar a pensar en querer vivir juntos, pero cuando esta idea surge, hay una pregunta que siempre la acompaña y esa es, ¿estamos listos para vivir juntos?
Y la respuesta no es sencilla porque cada pareja es distinta y cada situación muy particular. Pero hay señales que sí te pueden ayudar a aclarar esta duda para que logres tomar la mejor decisión en pro de su relación.
Pueden hablar de lo que sea sin miedo
Tener la libertad de hablar de cualquier tema; por más incómodo que este pueda ser, con tu pareja, es indispensable para poder vivir juntos. No puedes compartir vida y espacio con alguien que te genera miedo, con quien sabes que cualquier tema acabará en pelea, con quien no te escucha.
Son independientes
La independencia es completamente necesaria para que la vida en pareja funcione. Y no me refiero sólo a independencia económica, sino a independencia emocional, a haber cortado el cordón umbilical con papás, a saber que son ustedes quienes tomarán las decisiones y no la familia, a saber poner límites y entender que son un equipo.
Saben la responsabilidad que se les viene encima
Son conscientes de que aunque es un paso maravilloso y lleno de aventuras, también tendrán momentos complicados, tienen que aprender a convivir, a llegar a acuerdos, a resolver problemas, etc.
Comparten planes a futuro
Antes de siquiera pensar en irse a vivir juntos, tienen que saber si ambos quieren lo mismo, si se quieren casar o no, si quieren tener hijos o no, si están de acuerdo con el lugar en donde vivirán, etc.
Lo hacen porque quieren y no porque tienen que
Hay una enorme diferencia entre querer vivir con tu pareja a irte a vivir con ella porque tienes que, porque es lo que sigue o porque están esperando bebé. Y esto definirá si funcionará o no.
Resuelven los problemas juntos
Los problemas se resuelven en equipo sin importar lo pequeños o grandes que sean. Ni tú eres su mamá, ni él es tu papá, son pareja y las cosas se resuelven en equipo.
Respetan su privacidad e individualidad
La confianza es fundamental, si no confían el uno en el otro, si tiene la idea de querer controlar al otro, si crees que el irse a vivir juntos los deja sin libertad, mejor quédense separados.
Han pasado días juntos
Ya han pasado fines de semana juntos o muchos días conviviendo y no quieren matarse. Y es que si no aguantan un fin de semana solos, cómo piensan compartir un mismo espacio todo el tiempo.