A medida de que la generación ‘baby boom’ se desvanece, la generación Millennial se hace cada vez más poderosa. Cada día me encuentro con post o artículos nuevos que anuncian que los Millennial acaban de arruinar otra cosa, porque esta generación tiene una gran habilidad para arruinarlo todo.
Seguro tú también te has preguntado ¿Soy una millennial o no? Técnicamente todas las chicas que nacimos entre 1981 y 1997 lo somos, pero la verdadera respuesta debería ser ¿Qué tan verdadera millennial soy? Así que aquí te dejamos 10 señales sobre tus gustos o disgustos que podrían contestar a tu pregunta.
Eliges el vino sobre la cerveza siempre
Sé que a la gente normal le parece ilógico, pero unos accionistas informaron que los millennials están matando lentamente la industria de la cerveza. Algunas chicas me han dicho que prefieren algo que tenga un “mejor sabor y más increíble” que una cerveza, pero otras sólo lo toman por subirse al tren del mame.
Haces críticas a las chicas que se casaron jóvenes
Si la chica se embarazó, se enamoró joven, no está estudiada o quiere ser ama de casa ¡Muy su problema! Hace mucho tiempo se criticaba a las chicas que llegaban a cierta edad sin casarse, ahora se critica a las que quieren hacerlo. Creo que las chicas millennials podemos ser una mejor generación, en donde las chicas no sea criticadas por cuándo, cómo y por qué razones se casó.
Eres una twittera hatter que se queja de los “jóvenes”
Que si el reggaetón es una basura, que si Maluma apesta, que si el Spinner fue una moda absurda, que ya nadie lee ¿Adivina? Quizá toda tu generación esté de acuerdo contigo, pero twittearlo te hace una chica millennial, porque quieres destruir a la generación más joven. Recuerda que todas fuimos jóvenes y estúpidas.
Amas sin condición los gimnasios caros
Si describes a los gimnasios normales como disfuncionales o aburridos y prefieres los gimnasios con alberca, ducha, entrenador personal, spa y cuánta tontería innecesaria ¡Eres una millennial! Conseguir un cuerpo saludable es independiente al precio de la mensualidad del gimnasio. Si tienes el dinero, adelante gástalo, pero si te privas de otras cosas por pagar el gym, algo no anda bien.
Prefieres una comida más saludable o interesante
Si prefieres ir a comer alimentos fuera de lo común o saludables (o mínimo instagramniables), en lugar de ir a un restaurante normal o a la cenaduría de la esquina ¡Eres una millennial! Yo sé que suena lógico evitar ir a lugares llenos o con niños gritando, pero si no te gusta la comida saludable ¿qué caso tiene?
Las llamadas telefónicas te incomodan
Si te pones de nervios cuando te está marcando un chico, alguna amiga o tu mamá, eres una millennial. Te sientes más reconfortada si toda comunicación se basa en mensajes de textos. Quizá te parezca normal, pero hay que acostumbrarnos a las llamadas y respuestas rápidas.
Convives con las personas más en redes que en persona
Si tienes cientos de likes, seguidores y mensajes, pero nunca sales con tus amigos, vas a reuniones o te la pasas viendo el celular en lugar de hablar con la gente ¡eres una auténtica millennial! Las relaciones en persona son mucho más importantes que las de las redes sociales, porque son más sentimentales, reales y emocionantes.
Compras cosas en tiendas raras
Si aborreces las prendas de tiendas reconocidas o en supermercados, porque piensas que todo el mundo usa lo mismo, y prefieres gastar tu dinero en cosas extrañas e inservibles, creo que eres una verdadera millennial. Comprar cosas extrañas sólo para verte diferentes ¡No las hace útiles!
Odias ver la TV abierta o criticas programas (que en realidad te gustan)
Dices que la televisión abierta es basura, que las novelas apestan, que los noticieros mienten o que simplemente te aburre la programación ¡Bienvenida a millennialandia! Toda millennial está enamorada de Netflix o la TV por satélite. Pero cuando te burlas o dices odiar “La Rosa de Guadalupe” cuando en realidad la ves, eso es una doble moral millennial.
Extrañas la vida sin el Internet
Tristemente somos la última generación que conoció la vida sin el internet, así que los niños no entenderán que estar detrás de una Tablet les hace perder su infancia. Pero recuerda que el internet te ha ayudado más de lo que te ha estorbado. Por ejemplo, te sirvió para saber qué tan millennial eras.