Estoy a favor en que el cine es “el séptimo arte”. A través de sus personajes, el cine se encarga de transmitirnos sentimientos, emociones e incluso mensajes filosóficos que cambian nuestra mentalidad o perspectiva de vida.
Algunos piensan que las películas profundas son aburridas ¡Pero no debe ser así! Existen películas palomeras con tan buen mensaje que pueden funcionarnos de psicólogo. Sobre todo para esos días en que nos sentimos depresivas y existenciales.
Si decido quedarme (If I Stay)
Tomar una decisión difícil, trae caos a tu vida. Así sucede con Mia Hall, quien debe decidir entre seguir la música o al amor de su vida. La chica (en coma) debe decidir entre ambas opciones y al hacerlo el universo le quitará o devolverá la vida.
La prueba del amor (The Spectacular Now)
Sutter es un chico que se dedica a doblar camisas y (además de las fiestas) nada más le preocupa. Hasta que se topa con una chica introvertida y por primera vez decidirá si hacer una diferencia en la vida de otra persona o arruinarla y seguir viviendo sin preocupaciones.
Los imprevistos del amor (Love Rosie)
Hay una frase que dice “Cuéntale tus planes al universo y este se burlará de ti”. La protagonista nos enseña que a pesar de que tu vida no vaya como la planeaste, puedes hacer algo al respecto para ser feliz, aunque vayas hacia otra dirección.
Lady Bird
Todas tuvimos nuestra etapa rebelde. Por ejemplo “Lady Bird” cambia a su amiga por una chica popular, descubre que su novio es gay, le entrega su virginidad a un patán, etc. El final es conmovedor, pues madurar sana las grietas entre relación madre e hija.
Pequeña Miss Sunshine (Litte Miss Sunshine)
Mi favorita en la lista. Esta comedia explica que la vida se trata de “un concurso de belleza” en donde ganamos o perdemos. Los protagonistas son “perdedores” y al final se dan cuenta que no se viene al mundo a ganar, se viene a vivir.
El poder de la moda (The Dressmaker)
Esta mujer es acusada de asesinado cuando era apenas una niña. Se lo han repetido tantas veces que no recuerda si en verdad lo hizo o no. Explica que somos quien somos y nadie nos cambia a través de opiniones o chismes.
El arte de pasar de todo (The Art of Getting By)
Desde la primera escena, el chico explica que su nivel existencial es tan grande que termina pasando de todo. Fuma, no tiene amigos, no sale, no estudia ni trabaja… porque igual se va a morir. Un día una chica lo presiona para salir al mundo y descubre todo lo que se estuvo perdiendo; pues para que una muerte valga la pena, debiste haber vivido.
Ahora y siempre (Now is Good)
Esta película, saliendo de los clichés de películas que hablan de muerte, refleja en gran sentido a la vida. La protagonista tiene pocos meses de vida y hace una lista de todo lo que quiere hacer. Sobre todo cosas riesgosas para sentir que sí vivió; entre ellas amar.
Una historia singular (It’s Kind of a Funny Story)
La idea del suicidio es un pensamiento fugaz en toda persona. No querer un futuro es señal para buscar ayuda y el protagonista se da cuenta de ello. Entra unos días al psiquiátrico y al final de la película te cuenta el secreto que todos deberíamos oír para aferrarnos a vivir.