Tener unas piernas torneadas y fuertes requiere esfuerzo y constancia. No hay remedios mágicos que transformen tu cuerpo de la noche a la mañana, pero mientras más pronto empieces, más rápido verás resultados.
Estos ejercicios puedes hacerlos incluso en tu casa, así que empieza con 3 series de 15 repeticiones cada una. ¡No olvides calentar para evitar una lesión!
La pared es un gran aliado cuando se trata de ejercitar las piernas. Te permite mantener una postura adecuada y el trabajo que haces con las extremidades es realmente intenso.
Si no tienes un banquito en casa, puedes hacerlo en un escalón, en la banqueta, etc. El chiste es ponerse creativa y activarse.
Aquí trabajarás tu trasero. Así que manos a la obra, esas faldas y shorts te están esperando ansiosamente.
Puedes hacerlo en el filo de la cama, en el sillón o con ayuda de un banquito. Recuerda siempre mantener la espalda recta y bajar lo más que puedas.
No te olvides jamás de las pantorrillas, no querrás unos muslos definidos y unas pantorrillas flacas y sin forma.
No es necesario que acudas a un gimnasio, la orilla de la cama o del sofá pueden serte de muchísima ayuda. Ten cuidado porque la posición es complicada y puedes resbalar. Tienes que hacer fuerza en el abdomen para no caer.
Antes de que intentes esta sentadilla, debes calentar bien o te lesionarás. Abre lo más que puedas las piernas, flexiona y sube con las puntas.
Ésta es la sentadilla más completa, ya que el impacto que se genera al brincar te hace ejercer más fuerza y por lo tanto trabajas mucho más.