Los skinny jeans son aquellos pantalones que se ajustan a la perfección al cuerpo, resaltando nuestros atributos. Pero si no hay mucho que resaltar, ellos no harán milagros por nosotras. Así que si quieres tener un trasero digno de estos jeans, lo mejor será comenzar a trabajarlo de inmediato.
Recuerda que primero debes calentar al menos 10 minutos. Comienza con una serie de 10 repeticiones de cada ejercicio la primera semana, y ve aumentando paulatinamente las series y el número de repeticiones, según tu cuerpo se vaya adaptando.
Un pequeño brinco antes de hacer la sentadilla, hace que trabajen más músculos y que nuestra resistencia vaya aumentando.
Tenemos que trabajar todos los músculos del trasero.
Usa un palo de escoba para ayudarte a mantener la postura adecuada y mejorar tu equilibrio.
Puedes recargar el pie en la cama o en una silla.
Trata de no hacerlo tan rápido para que tus músculos trabajen más.
Al mismo tiempo tus piernas estarán tonificándose.
Todos los músculos de tu trasero te lo agradecerán.
Y tus skinny jeans mucho más.
Puedes hacerlo en algún escalón que tengas en casa.
Puedes utilizar ligas para aumentar la resistencia y la dificultad.