Seamos sinceras, pagar la membresía de un gimnasio no es la mejor de las opciones. Primero porque no iremos, nos dará flojera e inventaremos mil pretextos para no asistir; y segundo, la mayoría son bastante caras y nos duele la cartera. Pero eso no quiere decir que no podamos hacer ejercicio y tener el cuerpo de diosa griega que siempre hemos soñado. Tu casa es el lugar perfecto para lograrlo, sólo necesitas ese cuerpecito ansioso de ponerse en forma y una pared.
¿No me crees? Checa los ejercicios que puedes hacer y que te ayudarán a ponerte buenísima. Recuerda, puedes comenzar haciendo tres series de 10 repeticiones cada una e ir aumentando semana a semana.
Las paredes son ideales para fortalecer los músculos de tu espalda y brazos.
Recuerda mantener súper recta tu espalda. Puedes añadir unas mancuernas y subir y bajar tus brazos como se muestra en la foto. Trata de mantenerte en esta posición 30 segundos e ir aumentando el tiempo gradualmente.
Si te da miedo, puedes poner una colchoneta delante de ti por si te caes.
Este ejercicio fortalecerá tu abdomen y tus piernas.
Luce fácil pero una vez que lo intentas necesitarás toda tu concentración.
Ideal para hacer lunges sin perder el equilibrio.
Además de ayudarte a ganar flexibilidad, tus piernas ganarán músculo.
Y no te olvides de tu abdomen.