Ser responsables afectivamente quiere decir saber expresar nuestras necesidades y emociones siendo respetuosos de las emociones y sentimientos de las otras personas. Lo que hacemos y decimos tiene un impacto positivo o negativo en las demás personas dependiendo de cómo es que nos expresemos. Los vínculos que generamos con los demás requieren respeto mutuo.
Así que si quieres saber que sí y qué no es la responsabilidad afectiva, aquí te lo dejo:
SÍ ES:
- Hablar sobre nuestros sentimientos y expectativas sobre la relación
- Hablar con respeto sobre lo que nos molesta
- Cuidar de la otra persona, mientras también me cuido a mí
- Poner límites de mutuo acuerdo con la intención de respetarse
- Tener una buena comunicación
- Entender que nuestras acciones tienen consecuencias en el otro
NO ES:
- No ser claro o incumplir los acuerdos previamente establecidos
- No validar sus emociones o no permitir que las exprese
- Desaparecer y volver cuando quieras
- Ocultar información importante sobre nuestros sentimientos a la otra persona
- Pretender que el otro adivine lo que siento y/o necesito
- Hacer cosas que puedan llevar a ilusionarse a la otra persona, cuando nosotros no queremos implicarnos