La vida es una montaña rusa de emociones constantes y de momentos que van trazando la mujer en la que nos estamos convirtiendo. Por esa razón, aquí te dejo unos recordatorios si es que estás pasando por una etapa difícil, confusa o de mucha incertidumbre en tu vida.
Date un tiempo para analizar cada uno de estos puntos, créeme que te ayudarán muchísimo (en mí lo han hecho).
El pasado no puede cambiarse
Por más que lo quieras necesitas darle un abrazo a tu pasado (con sus cosas buenas y malas) y simplemente dejarlo en donde pertenece… atrás. Si sigues arrastrándolo contigo, no podrás ver hacia tu futuro.
Todo mejora con amor
Cuando impregnas amor, las cosas adquieren un nuevo significado.
La opinión de los demás no te define
Los demás siempre se tirarán en otros para evitar analizarse a sí mismos. No te preocupes por lo que puedan decir o pensar sobre ti… tú sigue tu camino.
La felicidad es diferente para cada persona
Cada una de ellas es válida, enfócate en lo que a ti te hace feliz y ve por ese camino.
A veces madurar, duele
De los momentos más difíciles es cuando más se aprende.
La intuición es real… confía en ella
No porque no la veas significa que no existe.
El tiempo tiene poderes curativos
No subestimes el paso de los meses para poder sanar. Todo lleva un proceso.
Llorar no significa que seas débil, al contrario…
Significa que estás en contacto contigo misma y que eres más fuerte que el promedio, pues no te da pena demostrar lo que sientes.
Para evolucionar es necesario cerrar ciclos
Dile adiós a esa ex pareja con la que ya no puedes estar, dile adiós a ese trabajo que no te hace sentir bien, etc.
Lo que das, se te regresa
Tarde o temprano.
Tú no controlas nada
Por más que lo desees no hay manera en que tú puedas controlar lo que sucederá mañana… sé libre y deja fluir las cosas.