¿Te has preguntado alguna vez si te amas? Amarte es aceptarte tal cual eres, respetarte, saber lo mucho que vales. Esto depende enteramente de tu voluntad y no de la de los demás.
El amor propio se refleja en los sentimientos que tenemos hacia nosotras mismas, nuestro físico, personalidad, carácter, comportamientos, actitudes. Si nos amamos no sólo estaremos logrando un equilibrio en nuestra vida sino que todo esto se proyectará al exterior y atraeremos mejores cosas y mejores personas.
¿No sabes si tú tienes amor propio?, estas señales podrían darte una idea de en qué tienes que trabajar.
Si tu novio te es infiel le echas la culpa a la otra
La falta de amor propio provoca que nos conformemos con lo mínimo, que estemos dispuestas a recibir migajas con tal de que no nos dejen. El miedo a preferir estar con alguien que nos lastima a preferir estar solas es reflejo de la poca valía que podemos llegar a tener por nosotras mismas. Así que es por eso que cuando el novio nos pone los cuernos nos vamos a la yugular de la otra mujer, le quitamos la culpa al hombre para que así podamos perdonarlo y evitar que nos abandone.
Dejas que te digan qué sí y qué no ponerte
Cuando no te amas lo suficiente le das las riendas de tu vida a la primera persona que crees es más capaz que tú. Permites que te digan lo que tienes que y no hacer. Nadie puede prohibirte cosas y mucho menos cuando se trata de tu propio cuerpo.
Permites traiciones una y otra vez
La falta de amor propio provoca que no te sientas merecedora de cosas buenas, así que crees que lo malo que te ocurre es porque de alguna forma es lo único que mereces. Si no me crees ¿por qué sigues llamando amigas a esas chicas que sólo te han traicionado y que hablan mal de ti?, ¿por qué sigues perdonando infidelidades?.
Ruegas al que te falló
Y no sólo perdonas una y otra vez a aquellos que se la pasan fallándote y haciéndote sentir mal, cuando ellos te chantajean y te amenazan con salir de tu vida, en lugar de que agradezcas que ese tipo de personas desaparezcan de tu vista, tú vas a rogar su regreso.
Te conformas con ser opción y no prioridad
Cuando alguien sabe exactamente lo que vale sólo está dispuesta a recibir lo que merece. ¿Cuántas veces has dejado que alguien te cancele el plan por qué le salió algo más importante?, ¿cuántas veces te has conformado con ser la amante?, ¿Cuántas veces has estado ahí para quien lo necesita pero nunca los encuentras cuando tú lo necesitas?.
No puedes nombrar más de 5 cualidades tuyas pero si cientos de defectos
Este ejercicio te dará una idea de cuánto amor propio posees. En una hoja en blanco traza dos columnas, en una coloca todas las cualidades que tengas, las cosas que te gustan de ti. Y en la otra columna escribe tus defectos. Si la columna de defectos es más larga, tu amor propio necesita ser fortalecido.
Estas al pendiente de las necesidades y deseos ajenos
Eres la típica amiga que se la pasa escuchando a los demás, dándoles consejos a diestra y siniestra Si te piden un favor no dudas en hacerlo, siempre estás al pendiente de los demás pero tú y tus necesidades jamás están en esa lista de prioridades.
No sabes decir ‘no’
El amor propio genera seguridad, te permite conocerte mejor, saber quién eres, qué quieres y que no. El miedo a decir no quiero, no me gusta, no estoy de acuerdo desaparece porque ya no buscas complacer o quedar bien con los demás sino contigo misma.
No te cuidas en ningún aspecto
No se trata de que todos los días andes vestida y maquillada como si fueras a asistir a un evento de noche. Se trata de que cuando te veas al espejo te gustes lo que ves en él. Se trata de que te cuides y te procures.
Haces las cosas por los demás y no por ti
Piensa detenidamente cuántas de las cosas que haz hecho hasta ahora en tu vida han sido realmente porque las deseabas tú y sólo tú. ¿Tu carrera la elegiste porque es lo que te apasiona o porque es lo que tus padres quieren que seas en la vida?, ¿Te vistes con la ropa que te gusta o con la que está de moda?, ¿te maquillas porque te gusta o porque crees que lo necesitas?.
Amarte significa elegir tu propio camino, descubrirte día a día, aprender a escucharte y ha confiar en ti.