¿Sientes que estás estancada en tu vida y por más que quieres, simplemente no puedes avanzar? Sin darte cuenta podrías estar haciendo alguna de estas…
Nota: El artículo no es nada personal en contra de ti o busca hacerte sentir mal. El único objetivo es decirte lo que podrían ser algunas verdades incómodas para que abras los ojos y cambies tu actitud y tu manera de hacer las cosas en tu día a día, ¡ánimo!
Vives comparándote con las demás
En vez de buscar tu individualidad y ver tus cualidades, prefieres fijarte en otras personas… en lugar de mirar hacia tu interior.
Insultas o envidias a las personas que tienen éxito
No soportas que alguien de tu misma edad y con los mismos recursos que tú haya logrado salir adelante.
Nunca te pones en acción para empezar algo nuevo
Siempre haces planes a “futuro” pero en realidad ese futuro jamás llega.
Pierdes la inspiración y motivación a la velocidad de la luz
Tan rápido como te llegan ideas, las echas a la basura por flojera o por creer que es “muy complicado”.
No crees lo suficiente en ti
Solita te saboteas.
Vives rodeada de complejos que no intentas superar
Crees que eso de ser “exitosa” no es para ti por el hecho de no tener un título universitario, no tener mucho dinero, y demás complejos que sólo están en tu mente.
No sabes “dejar ir”
Te aferras a cosas, pensamientos o personas que no te hacen bien.
Eres muy influenciable
Te dejas manejar por otros en vez de hacer lo que de verdad te hace feliz.
Te rodeas de personas pesimistas
Ellas jamás te dejarán salir del hoyo, recuérdalo.
Eres muy desesperada
Quieres que todo se de de un día a otro, y si no es así, te enojas y haces berrinche.
