Tu cepillo de dientes te ha estado mintiendo toda la vida. Te ha hecho creer que sólo sirve para mantener tus dientes limpios, cuando en realidad tiene varios secretos bien guardados. Pero hoy se ha acabado su jueguito pues lo dejaremos al descubierto, para que no vuelva a engañarte nunca más.
Él puede transformarse en una herramienta de decoración para tus uñas.
Darles una explosión de color en tan sólo segundos.
Además puede eliminar la suciedad difícil de alcanzar en ellas.
Tiene la capacidad de dejar como nueva a tu secadora de pelo.
Y darle textura a tu cabello sin dañarlo cuando lo trenzas.
Es súper bueno quitando el exceso de rimel de tus pestañas, además las separa para que se vean más bonitas.
Te puede ayudar hasta cuando te pintas el cabello.
Ponle un poco de laca y cepilla esos pelitos necios.
Cuando te exfolies el rostro, úsalo en las zonas de difícil acceso.
Puede mantener a tus labios suaves y saludables.
Y además te ayudará a hacer crepé en tu cabello sin destrozarlo en el intento.