Siento ser yo quien te lo diga o quien confirme las sospechas que tienes ya desde hace tiempo. Es momento de que aceptes la realidad, deja de maquillar algo que no puede arreglarse, no te aferres más a la fruta podrida, ha llegado el momento de que dejes de añadirle puntos suspensivos a una historia que llegó a su fin hace ya bastante tiempo.
¿No sabes de lo que hablo? Quizá esto te refresque la memoria:
Se les han acabado los temas de conversación
Cuando salen a comer, al cine o a cualquier sitio sólo ustedes dos, simplemente ya no saben de qué hablar, y prefieren quedarse en silencio, perdidos en sus pensamientos. La situación se vuelve bastante incómoda, a tal punto que ya no salen tanto, o lo hacen cuando hay más personas involucradas.
Y cuando encuentran uno, terminan peleando
Y si de pura casualidad divina encuentran un tema del cual hablar, siempre de los siempres termina en conflicto. Osea que sólo tienen dos opciones, quedarse callados o pelear.
Nota: Hemos hecho alianza con ‘Necesito un Consejo’ para ayudarte si es que estás pasando por un momento en el que necesites hablar con alguien sobre algún problema de autoestima, relaciones o cualquier otro dilema que tengas. Manda DM y te ayudaremos.
Dentro de ti, sabes que no tienes ganas de verlo
Sabes que no tienes ganas de verlo, pero tienes miedo de aceptarlo porque sabes cuál es la salida y no quieres tomarla. Así que lo ves más a la fuerza y por compromiso que por ganas. Ya no sientes emoción al verlo, simplemente se volvió costumbre.
Todo lo que hace o dice te irrita
No importa si está callado sin molestar a nadie, a ti ya te irrita hasta que esté respirando y eso querida mía, es una clara señal de que ya no quieres estar con él, basta que lo aceptes y muevas ese trasero para alejarte de ese infierno.
Prefieres salir sola antes de invitarlo
Si hay una fiesta, un evento familiar o algo por el estilo, ya ni se pasa por tu cabeza invitarlo, porque sabes que si va no te la pasarás bien. Así que mientes y le dices que es sólo salida de chicas, o que tus papás te dijeron que sólo podías ir tú, y mil excusas más.
Te atraen otras personas
Empiezas a sentir esa cosquillita, esas ganas de querer sentir de nuevo el romance, las primeras salidas. O tal vez ya hay alguien por ahí que te está moviendo cañón el tapete. No sigas ese camino peligroso, mejor termina las cosas por lo sano y emprende el vuelo a donde quieras.
Ya no visualizas tu futuro con él
Cuando su relación comenzaba creías que era el amor e tu vida, era fácil visualizarte con él, te imaginabas como sería vivir juntos, casarse y hasta tener hijos. Pero hoy eso se ha esfumado y ya no sientes que el quepa en tu maleta.
No te atrae más
Lo ves y ya no te provoca nada, incluso ha dejado de gustarte físicamente. E íntimamente ni te cuento, seguro que lo evitas a toda costa y te has vuelto experta en pretextos.
Han terminado y vuelto varias veces sin cambio
Lo más seguro es que cada vez que pelean terminen la relación y unos días después vuelvan prometiendo cambios, pero obvio nada cambia y todo empeora ¿Para qué seguir haciéndose tontos? Ya saben lo que sigue ¡Acéptalo!
Notas lo mismo de su parte
Todo lo anterior no sólo lo sientes o lo demuestras tú. También lo notas de su parte. Así que quítate la venda de los ojos y comienza a ver realmente la relación que tienes. No pasa nada, dolerá, pero no morirás y lo superarás más rápido de lo que crees. No te aferres a algo que no te hace bien, te estás perdiendo de algo realmente bueno allá fuera.