La vestimenta tiene un rol importante en nuestra vida; puede atraer miradas, emociones y te refleja sin necesidad de hablar. Para comunicarte solo con tu ropa, debes pensar como diseñador gráfico, pues hay bases, como la armonía de colores, que pueden crear los looks más perfectos.
Look monocromático; una fórmula que consiste en tomar un sólo matiz del círculo cromático y usar prendas de ese matiz variando su luminosidad y saturación.
El look monocromático tiene compatibilidad garantizada.
Colores análogos; básicamente consiste en tomar dos o tres colores que se encuentren uno al lado del otro en el círculo cromático. Podría ser los cálidos como naranjas con rosas…
…o colores más fríos, como azules con verdes.
No temas jugar con esta paleta de colores, pues la teoría análoga es, más que para guiarte, para inspirarte.
Prendas con colores complementarios; es decir aquellos que están uno frente al otro en la rueda. Un look aesthetic morado y amarillo.
Otro ejemplo de colores complementarios es el verde limón y fucsia, que parece mala idea pero al ponerlo en práctica queda un look fenomenal.
Colores complementarios divididos. En lugar de tomar el color complementario (el de enfrente), usa los colores de cada lado. Así tendrás un look con muchísimo contraste.
Combinación triádica, en donde usamos tres colores igual de separados, formando un triángulo equilátero. Por ejemplo, verde limón, naranja y morado.
Colores tétrada, en donde tomamos dos parejas de colores complementarios, formando un rectángulo. Aquí se recomienda acentuar sólo uno o dos de los cuatro matices.
Usa colores neutrales, blanco, negro o gris, para balancear y contrastar tu ropa más colorida.