Búscate un loco, de los de remate…
De los que cuando piensas que ya no puede hacer algo más estúpido, va y te sorprende con algo inesperado.
Busca a quién se ría a carcajadas, sin importarle dónde se encuentra o quién tenga alrededor.
Quién te cuente chistes malos y haga bromas tontas sin que puedas evitar y no sepas por qué.
Que cante por la calle con la música de algún coche e intente que tú también lo hagas. Que baile bajo la lluvia sin preocuparse si se resfría o despeina.
Búscate a alguien pesado, con sentido del humor negro, que no le importe decir lo que piensa y que se ría de sí mismo.
Búscate uno de esos de los que juegan con tus puntos débiles o manías sabiendo que consiguen desquiciarte, provocando en ti unas ganas locas de ahogarlo, pero con abrazos.
Busca un irracional, humilde, sencillo y directo. Que llore, que grite, que tenga carácter. Que te monte numeritos pero que los compense con muy buenas escenas en privado.
Que no sepas cómo va a reaccionar, que tenga múltiples personalidades y consiga enamorarte con cada una de ellas. Alguien con quien jamás tengas silencios incómodos.
Esa persona que hará todo lo posible por sacarte una sonrisa en los momentos más duros, que te dará la mano y no te soltará hasta que esté completamente seguro de que no pierdes el equilibrio.
Quien no haga falta que te diga nada, porque con la mirada te lo dirá todo. Que te entregará todo desde el minuto uno sin pedir nada a cambio.
Busca una persona con quién pierdas la noción del tiempo y del espacio…
Búscate un loco…