Cosas que no tienes por qué soportar de tu pareja… ¡aunque estés casada!

El amor en ocasiones nos vuelve (como diría Shakira), brutas, ciegas, sordomudas debido a la intensidad con la que muchas nos entregamos a esa persona que consideramos nuestro “todo”, lo sé porque me ha pasado, y estoy segura que a ti también. El problema viene cuando esa intensidad de sentimientos desbordados, provocan que no veamos esas cosas malas que podrían estar sucediendo en nuestra relación.

Nota: Hemos hecho alianza con ‘Necesito un Consejo’ para ayudarte si es que estás pasando por un momento en el que necesites hablar con alguien sobre algún problema de autoestima, relaciones o cualquier otro dilema que tengas. Manda DM y te ayudaremos.

Los “problemas” dentro de una relación son comunes y tampoco es algo que necesariamente sea algo negativo, pues cada pareja tiene una historia y sabrá cómo vivirla, no soy quién para meterme en eso. Sin embargo, sí te puedo decir que hay actitudes y acciones que por más amor que le tengas o por más tiempo que lleves de relación, no es sano que las permitas… por tu bien. Y hoy te diré tan solo algunas, esperando que las analices y que si te identificas con ellas, pongas un alto ahora mismo antes de que eso te lleve a un problema más grande.

Que se desquite contigo por problemas que tiene en el trabajo

Y no necesariamente me refiero a que llegue y te quiera golpear, sino a que día tras día se comporte contigo con una actitud y un lenguaje cortante, golpeado o hasta indiferente debido al “estrés” del día. Aunque tú lo comprendas y quieras ayudarlo, esta no es la manera de solucionarlo. Si lo permites solamente irás haciéndote menos día con día… recuérdalo.

Que intente hacerte menos “bromeando”

Hay líneas que jamás se deben cruzar, por eso, si permites que él entre broma y broma te haga sentir menos importante o hasta insultada, lo único que sucederá, es que él perderá el respeto por ti. Date tu lugar y aunque bromeen pesado, dile cuando algo no te haya parecido “divertido”.

Ser su sirvienta

Algunos hombres creen que el hecho de estar casados, les otorga en automático el derecho de poderte mandar y ordenarte. Lo peor es que algunos hasta se quieren “lucir” enfrente de los amigos para demostrar lo “machos” que son. Dale un aplacón si es que ha intentado o intenta esto en un futuro contigo.

Ser la responsable al 100% de los niños

Ser hombre no significa que la responsabilidad de los hijos sea nada más tuya. El hecho de que él de dinero (en el mejor de los casos) no significa que con eso ya haya “cumplido”. Él debe dedicar todo el tiempo que tenga libre a educarlos, jugar con ellos y darles amor. Tal y como lo haces tú.

Que te haga sentir “que le debes algo”

Esto principalmente sucede con mujeres que han decidido ser amas de casa. Recuerda que tú no le debes absolutamente nada, si son un matrimonio es porque aceptaron ser un equipo en todos los aspectos, jamás pienses que tú le debes algo.

Hacerte sentir responsable si él algún día te es infiel

Algunos hombres en su afán de querer salir con otras, comienzan a meter ideas en tu cabeza del tipo: “estás engordando”, “ya no me atiendes”, “me haces enojar mucho”, etc… que aunque no sean ciertas, ellos las inventan para poder tener un “pretexto” si es que algún día te son infieles. No permitas jamás esto.

Que la opinión de su familia pese mucho más que la tuya

Hay hombres que primero toman en cuenta y hacen lo que su mamita les diga sin importar lo que tú hayas opinado. Pon un alto cuando esto suceda.

La mala higiene

Si tu marido comienza a perder ese cuidado personal, habla con él. No seas grosera ni mucho menos lo hagas en tono de “burla” sino todo lo contrario, explícale lo importante que es para ti el hecho de que él se cuide y cómo influye eso en ti.

Que sea un holgazán

Si no va a trabajar, no mueve un pie para ayudar en la casa y además se enoja si no le cumples todos sus caprichos, déjalo y cámbialo por otro… no te puedo dar otro consejos más sincero.

Que te meta en problemas que a ti no te corresponde resolver

Por ejemplo: Si va a la tienda y pide “fiado” y luego no paga, déjalo que él mismo resuelva sus problemas. No te hagas su cómplice o cargarás problemas que no te corresponden.

Espero que estos consejos te hayan servido para charlar con él y llegar a un punto en donde juntos salgan adelante si están pasando por algo que a ti te incomode.