Estar en la universidad es uno de los logros más grandes de mi vida, y es que no es sencillo vivir esta etapa que está llena de cambios importantes. Aquí es cuando conocemos cara a cara al verdadero estrés, pero sin duda al final todo nuestro esfuerzo nos traerá una gran recompensa.
Si estás pasando por la misma situación entenderás perfecto las terribles cosas a las que nos enfrentamos.
1. Sobrevivir con poco presupuesto
Y es que seguramente aún no tienes un empleo, y si lo tienes es de medio tiempo, donando todo tu sueldo a las cosas que te piden en la escuela.
2. Dormir poco, o mejor dicho, no dormir.
Esto es una de las cosas que más trabajo me ha costado aceptar y es que adoro dormir. Es horrible parecer que vas a un casting de The walking dead, en vez de ir a tu facultad por las terribles desveladas.
3. Volverte adicto al café.
El café se convierte en tu mejor amigo, ya que será tu compañía día y noche mientras estás en finales. Llegas a quererlo mucho más que a tu novio.
4. Levantarte temprano para ir a la clase que odias.
Siempre es una tortura tener que levantarse temprano y peor aún si es para ir a la clase que piensas que jamás te será útil en la vida.
5. Tener mil exámenes en un día.
Esto sería equivalente a estar en una piscina llena de cientos de animales venenosos y salir sin ninguna picadura.
6. No tener vida social.
Estás tan ocupado en tus proyectos que cuando menos te das cuenta el fin de semana pasó volando y otra vez es el maldito lunes.
7. Perder la conexión WiFi.
Y más si estás por terminar un trabajo final, es la muerte.
8. Vivir con la horrible incertidumbre si la respuesta fue la correcta.
Típico que estas en medio de un examen y sufres por no saber si es la respuesta correcta o no.
9. Siempre dejar todo al final.
Creo que la mayoría sabe a qué me refiero: Un día antes estás haciendo todo el trabajo de meses atrás, o pretendes aprender todo lo de un semestre en un día para un examen.
10. Ver más a tus profesores que a tus padres.
Y es que pasas más tiempo en la escuela que en tu propia casa, pero extrañamente nunca llegas a sentirla como hogar. Jajaja
11. Que toda la gente sea lenta.
Por alguna extraña razón cuando vas con prisa la gente hace un complot para que llegues tarde.
12. Enojarte con tus compañeros una y otra vez.
Especialmente cuando es un trabajo en equipo, sale a la luz la versión más terrible de nosotros.