A veces, menos es más. Si tienes poco tiempo o simplemente quieres algo fácil pero rico, estos sándwiches son para ti. Con solo dos ingredientes, podrás disfrutar de una comida rápida, sencilla y llena de sabor. ¡Vamos a la cocina!
Sándwich de plátano y mantequilla de maní
Es un clásico y sólo necesitas plátano y mantequilla de maní. El dulzor del plátano combina a la perfección con la cremosidad de la mantequilla de maní.
Instrucciones:
– Unta una capa generosa de mantequilla de maní en ambas rebanadas de pan.
– Coloca rodajas de plátano sobre una de las rebanadas y cúbrelo con la otra rebanada.
Sándwich de queso y jamón
Este es un sándwich básico pero delicioso. Solo necesitas queso (puede ser el tipo que más te guste) y jamón.
Instrucciones:
– Coloca una o dos rebanadas de jamón sobre una rebanada de pan.
– Añade una rebanda de queso encima del jamón y cúbrelo con otra rebanada de pan.
Sándwich de nutella y fresas
Para los amantes del dulce, este sándwich es una delicia. Nutella y fresas son una combinación celestial.
Instrucciones:
– Unta una cantidad generosa de Nutella en una rebanada de pan.
– Coloca rodajas de fresas encima de la Nutella y cierra el sándwich con la otra rebanada de pan.
Sándwich de hummus y pepino
Fresco y ligero, este sándwich es perfecto para un almuerzo rápido. Solo necesitas hummus y pepino.
Instrucciones:
– Unta una capa gruesa de hummus en ambas rebanadas de pan.
– Añade rodajas finas de pepino sobre una rebanada y cúbrelo con la otra rebanada de pan.
Sándwich de queso y mermelada
Este es un sándwich que mezcla sabores dulces y salados de una manera exquisita. Solo necesitas queso (de preferencia uno cremoso) y mermelada.
Instrucciones:
– Unta una capa de mermelada en una rebanada de pan.
– Coloca una loncha de queso encima y cierra el sándwich con la otra rebanada de pan.