Se supone que el verano ya hizo su entrada triunfal, pero al parecer venía bastante deprimido o enojado porque las lluvias que nos han azotado los últimos días nada tienen que ver con la imagen que tengo de él. Y con las lluvias y los días más nublados que mis pensamientos, no puedo animarme y todo me da flojera, incluso vestirme. Pero al mismo tiempo no quiero verme ni sentirme toda fachosa, y estoy segura que a ustedes, mis queridas eslamoditas, les pasa exactamente lo mismo.
Pero no se preocupen les traigo unos tips buenísimos, para que armen su outfit que combina perfecto con la flojera que traen ahorita pero que no las hará ver mal.
Jeans, la blusa sin hombros más holgadita que tengas, zapatos todo terreno y anti contracturas de tobillo, lentes de sol (porque con esta lluvia ¿para qué molestarse en maquillarse?) y un impermeable o paraguas en tu bolso.
Usar doble chamarra es una idea de genios. La primera puede ser una sudadera o suéter delgadito y la segunda una chamarra impermeable, así tu estilo no se irá con el agua.
Vestir completamente de negro evitará que las manchas de lodo y agua te salpiquen toda y se noten demasiado, o por si un carro te lanza el agua de un charco como si de una catarata se tratara.
Usar una camisa larga encima de tu look te dará el confort que tu flojera necesita.
Hazle un nudito a las playeras que sientas que se ven demasiado fachosas y eso arreglará el problema.
Ponte una falda bonita y tu playera más deslavada, usada y “fea”. Verás como todo se fusiona y te da como resultado un look de bloguera de moda.
Las sudaderas sin gorrito van perfectas con tu mood de “no quiero hacer nada ¡carajo!”
Un cardigan es como una cobija portátil, así sentirás el apapacho de tu cama sin estar en ella.
Aunque no lo creas las timberland son súper cómodas y van de lujo con una actitud de flojera extrema.
Creo que este ni explicación necesita. Grita “que flojera tengo pero aún así me veo divina”.
La mezclilla siempre será tu amiga en esos momento difíciles de la vida.
Y los overoles ni se diga, son la comodidad hecha mezclilla.
Róbale una chamarra a tu novio y sentirás la magia recorriendo tu cuerpo lleno de flojera.
Si, los blazer también funcionan para estas situaciones y más si los usas con tenis ¡Obvio!
Rompe tu suéter de cuello de tortuga y hazte una pieza única como esta.