Los cumpleaños en invierno no son tan divertidos. Porque juntan tu regalo de navidad con el de cumpleaños, a veces lo olvidan por los festejos decembrinos e incluso no te festejan por la cuesta de Enero. Pero si a pesar de todo esto, tienes la fortuna de celebrar tus XV años, entonces emociónate porque serán especiales, y es que podrás usar vestidos fuera de lo ordinario.
Un vestido tipo Frozen, es decir que luzca colores de la naturaleza invernal. Como el azul o el blanco. Te verás sacada de una película de Disney.
Para unos XV’s suena raro usar un vestido negro de manga larga, pero sólo suena extraño si es verano, porque en temporada de frío luce perfecto y elegante.
Los colores del otoño también pueden ser una opción para comprar un vestido fuera de lo ordinario. Así no usarás uno colorido o de tono pastel… como el resto de tu salón.
El vestido rojo de XV años queda bien en cualquier ocasión, pero en invierno queda mejor, porque los tonos son más obscuros e intensos.
Muchas temen a usar un vestido blanco, por miedo a parecer novias dejadas en el altar. Pero si haces tu fiesta temática podrás combinarlo como si fueras nieve pura de invierno.
Lo mejor del invierno es que las telas varían, no son los vestidos típicos de tela tutú. Podrías usar terciopelo, seda, lo que se te ocurra.
Un vestido totalmente negro en temporada de calor es una pésima idea, pero en invierno está bastante ad hoc. Va con los colores de la temporada y combinará con la cualquier chaqueta que uses encima.
Cuando usas un vestido de colores vivos y le agregas formas, termina viéndose ranchero. Puedes aprovechar los colores sombríos para agregar texturas a tus vestidos.
Los mejores vestidos de XV’s se hacen con tela gruesa y fondos para dar una forma y volumen perfecto. En verano es una pesadilla por el calor, pero en invierno serán tu salvación.
Usa la temática del invierno a tu favor y usa un vestido que lo refleje totalmente, con texturas pinos, copos de nieve, temática navideña…
…Así que no temas llevar manga larga o un vestido extraño, si amas más el frío que el calor y te sientes identificada con la temporada ¿Qué más da?