Queridas eslamoditas, espero no aburrirlas con mis traumas con los chicos, pero es que realmente me ha ido tan mal que he decidido tomar precauciones en base a mi experiencia. He hecho una lista de todos aquellos chicos que eliminaré de mi lista de prospectos, es decir que no puedo volver a caer en las redes de alguno de ellos. Espero les sirva de algo y si no tan solo traten de comprenderme.
Los obsesionados con el fútbol.
No estoy en contra de los deportes, no crean que soy una enloquecida que se opone a que los chicos vean el fútbol. No tengo problema hasta que su vida entera gira en torno a eso. Que no usan otro tipo de ropa que no sea la de su equipo favorito, y ese tipo de cosas que ya hasta me sacan ronchas.
Quienes creen vivir en un videojuego.
Un día anduve con un chico que un día me dijo: ¿Te parece si vienes a mi casa y hacemos algo? Yo pensé que se refería a ver películas o a algo más sexy pero no. Fui una ilusa, pues lo que el tenía en mente era ponerse a jugar durante horas videojuegos mientras yo me aburría como ostra.
Los que están enamorados de sus músculos.
Si han coqueteado alguna vez con algún chico del gimnasio sabrán exactamente de lo que hablo. Esos que sólo se ven en el espejo mientras se ejercitan, que cuando se acercan a ti contraen todo el cuerpo para verse más grandes como si de un ritual de apareamiento se tratara mientras sus venas parecen querer explotar en tu cara.
Lobos de bar.
A estos es a los que más detesto, esos tipejos que dos cervezas les hacen creer que son guapísimos e irresistibles y se acercan a ti como si te estuvieran haciendo un favor. Mejor háganle el favor a la humanidad y desaparezcan.
Aquellos que creen estar en una película.
De verdad que en este mundo hay de todo. Son esos hombres que han visto demasiadas películas de amor y se copian todas las técnicas mega choteadas para ligar, y que además no sirven en el mundo real. Entiendan que se ven falsos y cero auténticos.
Los que se sienten el príncipe encantador.
Si encuentran a uno de estos huyan desesperadamente como si de un zombie se tratara. Son aquellos que creen que han llegado a rescatarte, que al principio te tratan como princesa y cuando has caído en sus redes te tratan como su esclava.
Quienes en lugar de cabello tienen un casco de gel.
Quiero una orden de restricción para esos hombres amantes del gel para el cabello. Y es que no puedes hacerle cariños y pasarle la mano sensualmente por su cabellera porque solo escuchas crujido y un polvo blanco comienza a emerger ¡asqueroso!
Los que se visten como si se hubieran hecho encima.
Maldigo a aquel que invento esa moda de traer los pantalones hasta la rodilla como si se hubieran hecho encima y el peso les hubiera bajado los pantalones. ¡Entiendan que no se ven bien! y que así nadie decente les hará caso.
Obsesionados con su celular.
De estos ya estoy fastidiada, les di muchas oportunidades pero a mi no se vuelven a acercar. ¿Qué es eso que intentas tener una conversación normal y ellos perdidos en el maldito aparato? Lo siento pero no me importa quedarme soltera para siempre, mejor sola que con un robot de estos.
Fumadores.
No puedo entender como con tanta información a cerca del tema aún hay personas de mi edad que se atreven a fumar. Yo no fumo y el olor es asqueroso y mucho más cuando un hombre te intenta besar y huele a cigarro. ¡Fumadores desaparezcan!
Niño de mamá.
Yo se que hay una edad en la que obviamente debes pedirle permiso a tus papás. Pero que para todo tengas que ir corriendo con mamá para ver si te da su aprobación, da mucha flojera.
El que me dice que me quiere teniendo novia.
Asco de hombres, no hay otra frase para describirlos. Esos que te llegan con el cuento de que ya no se llevan bien. Pues si no se llevan bien y ella está tan loca como dices ¡déjala! y déjate de tonterías. A otra con ese cuento porque yo me quiero demasiado como para ser plato de segunda mesa.
Inmaduros críticos.
Estoy consciente de que los hombres tardan un poco más en madurar que nosotras, pero tampoco hay que exagerar. Esos hombres que ya están por llegar a los treinta y aún su único objetivo en el mundo es superar al borrachera que se pusieron el fin de semana pasado. ¡Flojera!
