Si andas pensando qué ponerte en la cena familiar para que nadie se infarte o para que no te critique, ¡pues muy mal!, la estás mea cajeteando porque entonces quiere decir que no has aprendido nada este año. Pero aún estás a tiempo de dejar atrás ese instinto de andar quedando bien con todo el mundo, de dejarte guiar por las críticas y opiniones ajenas. ¿Cómo dar el primer paso?, yéndote bien perris a la cena navideña, más o menos así:
Si quieres enseñar pierna, pues enseña pierna y quien te diga que te tapes porque hace frío, les respondes: “Si tienes frío tápate tú”.
Tú vete mega perris elegantiosa de mega más aunque todos anden en sus fachas.
Brilla más que toda la decoración navideña.
Porque tu entrarás en el nuevo año brillando y ganando como siempre.
Sin blusa porque puedes y porque quieres.
Medias y vestidito sexy.
Fiel a tu estilo y la queso.
Porque la mejor de las fotos del recuerdo serás tú.
En RBD tú.
En rojo y no porque quieras un novio, sino porque tú te amas cañon.
El escotazo y a quien no le guste que se tape los ojos.
Enfundada en terciopelo.
Que se vea la clase.