“No amor, era una llamada de Telcel”, “es el primo gay de mi amiga”, “me quedé dormida viendo Grey’s Anatomy” (si dormida… pero en cama ajena).
Aquí van mis mejores peores mentiras, por si te quieres arruinar la vida igual que yo:
1. El clásico “me quedé dormida”
Pero con GPS apagado, modo avión y pestañas postizas volando. me ha funcionado muchísimas veces, solo lo uso cuando no se me ocurre nada… (seguramente han de pensar que soy la bella durmiente porque me la vivo dormida jejej)
2. “Era un amigo de la uni”
El vato no estudiaba, no era mi amigo y ni siquiera sabía leer sin mover los labios. Esta funciono pero ojo… úsala una vez, porque sino va a estar muy sospechoso que medio pueblo fue contigo a clases
3. “Me vino”
La mentira más poderosa del siglo. “¿Por qué estás rara?”, “¿por qué no quieres verme?”, “¿por qué no hiciste FaceTime anoche?”. Yo: “Me vino” (cuando en realidad andaba bien a gusto con el otro, Dios me perdone).
4. “Me estoy desconectando de todo”
Traducción: me fui a otro cuarto para textear sin que escuches el teclado, incluso me puse incienso para justificar mi vibra zen. El problema fue que luego sí se me olvidó contestarle. Al final, me desconecté… pero de la relación.
Moraleja:
La adrenalina no vale una crisis de ansiedad ni perder a alguien que sí te quería. Puedes ser coqueta sin andar con dobles agendas y si te vas a ir… vete, pero con dignidad, no con mentiras absurdas que ni tú te crees.