No eres rara, no eres “poca cosa”. Es que después de la era de las redes sociales, TODOS estamos medio oxidados para hacer amistades reales.
Antes pensaba que para ser popular hay que hacer de TODO, pero la verdadera fórmula para ser popular es más sencilla (y más absurda) de lo que imaginas.
1. Haz tu propia lista VIP
Las personas populares tienen algo en común: saben con quién quieren llevarse. Entre más gente te caiga bien (de verdad, no de dientes pa’ fuera), más les vas a caer bien tú. Es como energía espejo: sonríes, sonríen. Les hablas, te hablan. Básico pero mágico.
2. Aprende a usar tu voz como arma secreta
Si hablas como caricatura nerviosa con tonos agudos, la gente no te toma en serio. Tampoco te digo que finjas ser Darth Vader, pero una voz segura, pausada, hace que todos te escuchen. Y de paso, no quedas como ardilla acelerada.
3. Los gestos hablan más que tu outfit
Literal: aunque traigas el mejor look, si tu lenguaje corporal grita “quiero evaporarme”, nadie se va a acercar. Haz contacto visual, ríete fuerte, usa las manos al hablar (sin parecer espantapájaros). Que tu cuerpo también diga: “sí quiero convivir, no muerdo”.
4. No seas aburrida, nunca jamás
La confianza no viene de ser la más guapa ni la más lista, viene de no dar hueva. Si fluyes, si escuchas, si te interesas por los demás, automáticamente se genera esa chispa. Popularidad = gente entretenida, no perfecta.
Ser popular no es tener miles de seguidores ni hacer un TikTok viral. Es conectar, caer bien y proyectar seguridad. O sea, que la gente diga: “qué padre estar con ella, me da buena vibra”. Eso sí: siéntete cómoda, que no se trata de actuar como alguien que no eres.