Todas soñamos con tener un abdomen plano, pero muy pocas hacemos algo para conseguirlo. Somos conscientes que todo está en la alimentación pero no siempre sabemos qué es lo que debemos comer para conseguir nuestro objetivo.
Hoy sabrás cuál debe ser la base de tu alimentación para así perder esa molesta grasita.
Aceite de oliva.
Una cucharada al día (como aderezo para pescado o ensaladas) bastará para que todos sus nutrientes te beneficien. Procura que sea extra virgen y no lo calientes jamás, pues las altas temperaturas lo dañan y podría perjudicar tu salud.
Aguacate.
Contiene grasas monoinstaturadas que son escenciales para el organismo y que no se almacenarán en ninguna parte de tu cuerpo. Procura no comer más de 1/4 de taza al día.
Almendras.
Son un aperitivo perfecto, están llenos de fibra, proteínas, vitamina E y magnesio. Se recomienda no ingerir más de 9 gramos al día, es decir, como 23 almendras.
Chocolate oscuro.
¿Creías que no podías comer chocolate? Pues déjame decirte que si es oscuro sí, y entre mayor porcentaje de caco tenga mucho mejor, entre un 70% y 85 % es lo ideal. Puedes encontrarlo en tiendas naturistas, no en la tienda de la esquina. Te ayudará a procesar y eliminar grasas.
Espinacas.
Es una de las verduras más completas, posee vitamina C, vitamina K, hierro, potasio, magnesio y calcio. Cómelas en ensaladas o sandwiches. Siempre son mejores crudas.
Yogurt.
Para que el yogurt te beneficie debe decir en la etiqueta: “cultivos vivos y activos”. Estos eliminarán las bacterias malas de tu organismo que te provocan hinchazón, procesarás mejor las grasas y así obtendrás un vientre más plano.
Huevo.
Tienen la habilidad de mantenerte satisfecha sin inflamarte gracias a su combinación de aminoácidos esenciales, proteínas y grasas. La mayoría de los expertos coinciden en que un huevo al día es suficiente.
Salmón.
Los pescados grasos como el salmón, el atún y la caballa, están llenos de ácidos grasos omega-3 que pueden acelerar el metabolismo haciendo que pierdas peso con mayor rapidez. Comerlos 3 veces a la semana será suficiente.
Bayas.
Están llenas de fibra y está comprobado que entre más fibra consumas, menos grasa absorberás. Trata de comer una taza al día de arándanos, frambuesas, fresas, moras, o las que más te gusten.
Manzanas.
Además de ser una gran fuente de fibra para ayudar a la digestión y promover la pérdida de peso, las manzanas también contienen fenoles que reducen el colesterol malo y aumentan el colesterol bueno. Cómete una al día y siente la diferencia.