10 formas de lidiar con la frustración y el estrés

Porque respirar profundo no siempre alcanza cuando quieres lanzar el celular por la ventana.

Hay días en los que TODO te abruma: el trabajo, los pendientes, la gente que te habla sin razón, tu ex que no supera el 2007 y tú que solo querías paz y una torta de tamal caliente. Si sientes que estás a dos neuronas de explotar, esta guía es tu nuevo instructivo de supervivencia.

1. Escríbelo TODO… y luego rómpelo

Agarra papel, lápiz y saca todo lo que te frustra como si estuvieras quemando cartas de tu ex. Luego rómpelo como ritual de “me libero, pero sin dañar a nadie”.

2. Cambia de lugar (literalmente)

Muévete de habitación, sal a la tienda, ve al baño si estás en junta. Cambiar de espacio físico aunque sea dos minutos, ayuda a que tu mente respire y deje de sobrepensar como disco rayado.

3. Haz ejercicio… aunque sea con odio

No necesitas amor propio para ir al gym. A veces basta con frustración acumulada. Corre, boxea, salta, baila. Lo que sea, pero suda esa rabia.

4. Activa tu “modo robot”

Cuando estás demasiado saturada para pensar, haz solo lo mínimo: baña tu cuerpo, lava un traste, responde un solo mensaje. Una cosa a la vez, sin pensar en todo lo demás. El multitask es el demonio.

5. Haz una cita contigo (obligatoria)

No es opcional, es emergencia emocional. Ve sola a un café, date un masaje, una tarde sin notificaciones. Trátate como tratarías a tu mejor amiga si la ves al borde.

6. Pregúntate: “¿Esto me va a importar en un año?”

El 80% del estrés viene de cosas que no vas a recordar ni en un mes. Ponle zoom al problema y desinfla el drama innecesario.

7. Cambia el soundtrack mental

Hazte una playlist que te suba el ánimo. Nada de baladas tristes. Pon reguetón, pop de los 2000 o lo que te haga sentir como diosa invencible.
Ejemplo de título de playlist: “Pa’ que se me olvide que lloro por todo”.

8. Di que NO y apaga el celular

A veces lo que más ayuda no es hacer más, sino hacer menos. Y si eso implica decirle a alguien: “hoy no puedo con tu drama”, dilo con paz y con voz firme.

9. Saca la risa escondida

Ve videos tontos, memes, TikToks absurdos. Ríete hasta del caos. A veces el humor es el escudo más sano para no estallar.

10. Abraza tu frustración (sin juicio)

No eres débil por estar cansada. No eres floja por sentirte saturada. Solo eres humana, y estás haciendo lo mejor que puedes. A veces eso ya es más que suficiente.

Frustrarse no es el fin del mundo. Es solo un aviso de que necesitas un descanso, un cambio o un abrazo (aunque sea de ti misma).
Así que no te culpes por sentir mucho. Solo aprende a soltar a tiempo.

Porque si vas a explotar… que sea bailando, no llorando.