Te ves fea con esos lentes… porque no son los tuyos. Aquí los que sí

Sí, reina… esa cosa que usas para ver mejor también puede hacer que los demás te vean MEJOR.

La belleza está MUY relacionada con la simetría facial.

Y como ninguna cara es perfectamente simétrica 
los lentes se convierten en la herramienta secreta para engañar al ojo

Entonces… ¿cuál me queda según mi carita?

Si tu rostro es redondo:

Lentes cuadrados o rectangulares.
Porque equilibran y alargan tu cara como si estuvieras modelando en Zara.

Si tu rostro es cuadrado:

Lentes redondos, ovalados o tipo aviador.
Le bajan lo intenso a tu mandíbula y suavizan TODO.

Si tu rostro es tipo corazon:

Redondos, geométricos, rectangulares.
Balancean tu frente y hacen que la parte de abajo se luzca más.

Si tu rostro es tipo diamante:

Lentes redondos, ovalados y tipo cat-eye.
Suavizan y te hacen ver carísima y armoniosa.

Si tu rostro es ovalado (la favorita de Dios):

Amiga… todo te queda.
Eres como Barbie: puedes usar desde lentes tiny hasta tipo “señor millonario en yate”.

¿Y si no sé qué cara tengo?

Ponte frente al espejo con el cabello recogido.
Dibuja el contorno de tu cara con lipstick viejo.
Lo que salga, googleas “tipos de rostro” y comparas.
(Es ciencia con chisme, no te me estreses).

Lentes no son solo para ver… son para verte.
Más guapa. Más simétrica. Más tú, pero con efecto “me arreglé sin esfuerzo”.
Así que la próxima vez que elijas lentes, no pienses solo en graduación… piensa en proporciones, estética visual.