Las mujeres somos muy raras, eso hay que aceptarlo… Y entre todas esas peculiaridades que tenemos, hay una con la que todas nos identificamos… ¡Comprar ropa que nunca usamos!
Así es, por alguna extraña razón todas hemos pasado por esa incómoda experiencia en la que durante un momento de “atrevimiento” a vernos diferentes, decidimos gastar (o más bien “malgastar”) nuestro dinero en prendas que literalmente nunca nos hemos puesto y que seguramente seguirán como nuevas dentro de nuestro closet por muchos años más.
A continuación, te dejo una lista ¡estoy segura que mínimo te identificarás con la mitad!
Overoles
Jeans rojos, verdes o amarillos.
Faldas o suéteres con animal print de leopardo
Leggins de vinipiel.
Bodysuits con encaje o transparentes.
Blusas traslúcidas
Shirtdresses
Medias con diseños lindos
Tirantes para sostener las medias a los shorts
Botas arriba de la rodilla
Medias de red
Pantalones blancos
Sombreros… muchos.
Playeras de este tipo.
Sweatshirts con escote de espalda
Camisas y playeras con un gran lace up