Las faldas son posiblemente la prenda que más representa el lado femenino y sexy en una mujer. Por esa razón no puedes dejar pasar la oportunidad de tener que consentirte e ir consiguiendo poco a poco todos estos estilos de faldas que a continuación te vamos a mostrar:
Tarde o temprano las usarás y créeme que te harían lucir muy bien.
Las faldas neón van súper bien en lugares soleados. Son perfectas si vas al colegio y quieres hacer saber a todos que tú eres la que manda, ya que además de llamar la atención, son sexys y no cualquiera se atreve a usarlas aunque se vean increíbles.
Las maxifaldas a la cadera son básicas, ya que las puedes usar no sólo con zapatos, sino con tenis o flats. Si te sientes orgullosa de tu trasero, con una falda de este tipo lograrás presumirlo de la mejor manera.
Una falda de jeans combina perfectamente en la playa y con traje de baño. Es tu mejor opción si no quieres estar muy destapada pero fresca al mismo tiempo.
Las minifaldas ajustadas son perfectas para una noche de chicas en un bar. Son sexys y puedes combinarlas con crop tops y unos lindos zapatos.
Las faldas de tela de algodón son realmente mis favoritas por el simple hecho de que son casuales y las puedes usar de diario de la manera más sencilla posible. No necesitas mucho para hacer que se vean fabulosas.
Si eres más sexy y con piernas lindas, las abiertas serán tus favoritas.
Yo no tengo una cintura tan definida como la de esta chica, pero si la tuviera me la pasaría usando este estilo de faldas. ¿Te gustan?
¡Oh Dios mío! Dime por favor que tú también te enamoraste de esta falda.
Con faldas color pastel lograrás un estilo vintage y relajado. Combínalas con blusas blancas y recuerda que el truco está en traer gafas para hacer aún más interesante esta combinación y tu personalidad.
La falda elegante que puedas llevar a una presentación en la escuela o a un evento importante te salvará de muchos problemas.
Las favoritas de los hombres siempre serán las de colegiala. Ya sea lisas o de cuadros, ambas son muy femeninas y te harán lucir súper sensual.
