El ingenio mexicano siempre ha superando todas las expectativas, y es que tenemos una suculenta diversidad de antojitos que simplemente no funcionan si los sirven en otra cosa que no sea una bolsita de plástico. Sinceramente les da un toque único que no cambiaría por nada.
1. Raspados.
Es todo un arte raspar un hielo enorme y que salga una perfecta bolita. Lo ponen en la bolsa y agregan el jarabe del sabor que más te guste. Creo que iré a buscar uno ahora mismo.
2. Refrescos súper fríos.
Era un clásico salir de la primaria, ir a la tiendita y pedir una deliciosa Lulú de uva en bolsa. Seguro varios saben de lo que hablo.
3. Congeladas de sabores.
Existen de miles de sabores, pero por alguna extraña razón las únicas que venden siempre son las de rompope. No hay nada que supere hacer un hoyito a la bolsa y esperar a que se derrita un poco para poder comerla. ¡Un verdadero deleite!
4. Fruta preparada.
Unas deliciosas jícamas con chile jamás te sabrán más ricas que en una bolsa. Lo sabrás cuando se quede hasta abajo el limón y el chilito en una especie de caldo. Hasta se me hizo agua la boca.
5. Chicharrones.
Son extremadamente deliciosos cuando agregas crema y salsa. ¿Los has probado así? Seguramente conocerás el cielo cuando hagas esta combinación.
6. Gomitas extra ricas.
Por qué conformarte con un sabor de gomitas, cuando puedes hacer una mezcla de diferentes y ahogarlas en delicioso chamoy y en una bolsa.
7. Aguas frescas.
Para estos días de calor nada como una refrescante agua de tamarindo o de Horchata, servida en bolsa con muchos hielos.
8. Papitas fritas.
Últimamente las he visto en vasos preparadas, pero para mí saben mucho mejor en una bolsita con salsa y mucho limón.
9. Eskimos.
Son una especie de licuado, pero de algún modo son tan esponjosos como una nube. Si lo sirven en vaso pierden todo su encanto.
10. Jugo de naranja
Éste no es precisamente un antojito, pero la próxima vez que compres un jugo no dudes en pedirlo en bolsa, notarás que le da un toque de sabor especial.
