Normalmente cuando escuchamos la palabra suegros, lo asociamos de inmediato a algo negativo, cuando la verdad es que no todos los suegros son personas desagradables dispuestos a hacerte la vida de cuadritos. Obviamente para lograr llevarte bien con ellos, tiene que ser una vía de ida y vuelta porque si ellos no se abren, por más que lo intentes nada se dará.
Así que si ves que tus suegros tienen el camino abierto y no son unos cerrados de mente, estas cosas pueden lograr que te adoren hasta más que a su propio retoño.
Sé tú misma
Sé que suena a cliché y algo muy obvio, pero en la práctica y a la mera hora, es lo que menos hacemos por nuestros complejos de siempre querer agradar y quedar bien. Cambiar quien eres no te ayudará en nada, si no les caes bien y no te quieren por quien eres, pues ellos se lo pierden. Así que tú relajada y sé como eres siempre, no hay nada que se note más que alguien falsa.
No seas condescendiente
No mientas por convivir, ni des la razón para quedar bien. Siempre expresa lo que piensas y opinas, no temas opinar distinto. No se trata de que tus suegros crean que eres igual a ellos, se trata de que ellos sepan que tienes voz y opinión propia.
No trates diferente a tu novio
Ni lo trates con más amor del normal ni lo ignores. No tengas pena de mostrar tu afecto sólo porque están ellos. Trátense de forma normal, eso creará una ambiente y vibra natural y relajada.
Sonríe pero sin exagerar
No tienes que andar con la sonrisa y la risa a tope y en todo momento. Volvemos a lo mismo, sé tú querida mía.
Interésate por ellos
Hazles preguntas para conocerlos mejor, acerca de su trabajo, cómo se conocieron, y cosas sencillas que les haga sentir que estás interesada, que tienes plática.
Llévales detallitos
Llévales de vez en cuando detalles que les hagan saber que piensas en ellos, que los aprecias, y no esperes a una fecha especial, hazlo en días random.
Pásales tu número
Que salga de ti el pasarles tu número para que te tengan en whats, hazles saber que cualquier cosa pueden comunicarse contigo, esto creará confianza.
Ofrece ayuda
Si estás en su casa, ofrécete a poner o levantar la mesa, a lavar los trastes, si ves que se les acabó su bebida, prepárales otra, etc.
No contestes con monosílabos
Si te hacen preguntas, si tratan de hacerte la plática, no contestes solamente diciendo ‘sí’ y ‘no’, échale ganitas y genera plática que para una conversación se necesitan dos.
Deja bien parado a su hijo
No se trata de que lo alabes o cuentes mentiras sobre él. Pero puedes contar alguna anécdota graciosa o linda en donde él se haya portado súper lindo.
