Hoy les haré una confesión muy íntima ¡amo comer! y más si se trata de postres, son como mi criptonita, no me puedo resistir a ellos. Es por eso que no me importaría que mi novio llegará con uno así en lugar de uno con diamantes. Creo que lo disfrutaría mil veces más.
¿Tu te resistirías?
Una pequeña dona y un chocolate en lugar de un diamante.
Un enorme anillo hecho con deliciosos cupcakes.
Una galleta con nuestros nombres en ella.
Muchas donitas y diamantes de papel.
Un anillo extremadamente dulce.
Este no me lo podría comer, está tan bello que lo conservaría para siempre.
Imagina que te de un pastel de cumpleaños y al partirlo veas en anillo.
No lo comparto con nadie.
Se ve tan divino.
Digno de una reina.