Comenzar tu día con el pie derecho no sería posible sin tu cafecito de las mañanas. Aprovecha este hábito y las primeras horas del sol para tomar unas selfies increíbles, pues es la hora en la que más fresca, feliz y arreglada estás.
Viendo tu celular, una pose natural que te llenará de hearts.
Dando un sorbo con una mano en la cintura, así estilizas tu figura luciendo casual.
Selfie paparazzi, es decir, con una mano al frente evitando las cámaras.
Luce tu look completo con una selfie sentada en la banqueta tomando tu café.
Cubre la mitad de tu rostro con el café para que tu outfit sea el protagonista de la selfie.
Bebiendo tu café en el coche, recargada fuera, sentada de copiloto, manejando, etc.
No face selfie, si tu rostro aún no está despierto, toma una selfie y que tu café te cubra.
Luce elegante en una silla con tu café y la pierna cruzada.
Si no eres fan del café pero te latieron las selfies, usa un refresco, agua o té.
Luce alguna parte de tu look que te haya gustado hoy, tus aretes, cabello o hasta las uñas.
Caminando y bebiendo, sal de tu zona de confort y anímate a una foto con movimiento.
Selfie de lejos bebiendo tu café, así sale todo tu look, dónde estás, accesorios, peinado, etc.
Haz esa pose que siempre quisiste, ahora tienes a tu cafecito de excusa para hacerla.
La clásica selfie distraída, donde no te das cuenta pero luces bella y fresca naturalmente.