Seguro que por ahí tienes una cobija o una mantita favorita, de esas que no sólo son súper calientitas y pachoncitas sino que además a la vista es realmente linda.
Bueno, pues es momento de que la saques de donde la tenías guardada, le des una buena lavada y prepares el escenario para que tú y ella se tomen las siguientes selfies.
Acomoda tu celular en un cojín, programa la toma y da tu mejor ángulo.
Una fotito desde arriba mientras te tomas un latte y lees tu libro o revista favorita.
Así como que no te das cuenta.
La foto graciosa no puede faltar.
Una medio cachondilla.
Presumiendo hasta la pantufla invernal.
En medio de la relajación.
Presumiendo tu rinconcito.
Una de cerca para que ella sea la protagonista.
Como si no llevarás nada debajo.