Revisando mi guardarropa me di cuenta que un 98% de mis blusas son de manga corta o simplemente no las tienen. Tengo como dos que tienen manga larga y sinceramente nunca las uso. Es por eso que me he dado a la tarea de revindicar su camino y devolverles el lugar que merecen.
Y es que no lo había notado pero las mangas cambian por completo un atuendo, si no me crees checa de que te has estado perdiendo.
Las faldas cortas obtienen un aire elegante si se usan con una playera o suéter de manga larga.
No siempre el clima está como para andar exponiendo los brazos, así que tu outfit del día las necesitará cuando menos te lo esperes.
Los conjuntos de dos piezas como este, toman un nuevo significado cuando cubres los brazos y sólo le das protagonismo al abdomen.
Son perfectas en los trajes de baño, y es que a veces no queremos tostarnos la piel.
No tienes que usar las faldas tubo con blusas pequeñas todo el tiempo. No tiene nada de malo cubrir todo el cuerpo.
Los rompers con manga larga se ven hermosos y no te acalorarán.
Las mangas largas te permitirán lucir mejor los hombros.
Sin mangas largas no podríamos amarrarlas a la cintura.
Sólo con ellas lograrás un look desenfadado.
Un cardigan no es un cardigan si no tiene mangas.
Un escote en la espalda sorprenderá mucho más si tiene mangas.
Estiliza tus brazos.
Y puedes encontrar modelitos súper lindos.
Intenta usar atuendos formales incluyéndolas.
Un chaleco se ve mil veces mejor con una blusa con mangas.
