Kylie Jenner tiene una relación amor-odio con sus labios. Jamás se ha sentido a gusto con el tamaño y la forma que la naturaleza le dio. Así que desde hace varios años comenzó a rellenarlos para que lucieran mucho más voluminosos. Pero cuando se convirtió en madre, decidió eliminar los rellenos porque quería ser un mejor ejemplo para su bebé.
Esta decisión obviamente le duro un suspiro, porque los rellenos han vuelto y con más fuerza que nunca. Si bien el maquillaje ayuda a que estos luzcan mucho más grandes de lo que son, los rellenos siguen y seguirán ahí. Y a las pruebas me remito, porque así es como lucen sus labios antes y después del maquillaje.