Lo terrible de las redes sociales es que le da voz a quienes no tienen ni idea de lo que dicen, a quienes hablan verdades desde la ignorancia y/o prejuicios. Y una vez Mar de Regil está siendo blanco de las críticas.

Y es que resulta que estaba grabando un ‘GRWM’ mientras contaba que fue a un salón de uñas que se las dejó horribles. Pero que en lugar de reclamar (que estaba en todo su derecho), les pagó y hasta el 15% les dejó. Que porque le da pena hacer valer sus derechos (a pero andar expresando barbaridades en redes, eso sí no le da pena), y remató con la frase: “siento que las niñas bonitas no nos peleamos”.
Y bueno, esto sigue reforzando la idea de que las mujeres calladitas se ven más bonitas. Que por ser bonita debes siempre ser de tal manera que no incomodes a los demás, etc.
Vaya mensaje…