Los 15 problemas más comunes que llevan al divorcio

No, el divorcio no es una plaga ni está de moda. Que nuestras abuelas o nuestras madres no hayan querido o podido elegir separarse de sus parejas, no quiere decir que antes las familias ‘duraban más’ juntas, sino que los tiempos no le permitían a las mujeres elegir ni ser independientes, cosa que ahora sí que tenemos. Divorciarse no es un fracaso, una vergüenza, ni el termino de tu vida, simplemente es el cierre de un ciclo más como los miles que tendrás en tu vida.

Las relaciones amorosas son complejas, y existen problemas que pueden desembocar en el divorcio. Y estas son las más comunes:

Infidelidad

La infidelidad es una falta de respeto y lealtad hacia la pareja. Esta socava por completo la confianza y daña los cimientos de cualquier relación por más fuerte que esta sea. Hay diferentes niveles de infidelidad pero no por ello una menos dolorosa que la otra. 

Adicciones

Ya sea al alcohol, drog4as o adicciones emocionales y de comportamiento, estas siempre terminan por desgastar la relación. Y es que quien está a lado de una persona con adicciones, por lo general se mete en el papel de salvador y eso simplemente no funcionará porque el único responsable y que puede hacer algo por sí mismo es quien está padeciendo el problema.

Diferentes puntos de vista

No me refiero a puntos de vista sencillos como que a ti te gusta el café y a la otra persona el té. Sino esas diferencias en decisiones importantes y que definen la vida. Como que uno quiera casarse y el otro no. Que uno quiera hijos y la otra persona no, etc.

Redes sociales

Sí, las redes sociales son hoy en día una de las causas más comunes de divorcios. Estas nos crean falsas expectativas de lo que se supone debe ser una relación. Idealizamos y romanizamos de más y cuando la verdad sale a la luz, todo se derrumba.

Personas tóxicas

Permitir que personas ajenas a la relación (amigos, padres, hermanos, etc.) se metan y se involucren en la relación siempre da como resultado problemas y separación.

Falta de comunicación

La falta de comunicación es y siempre ha sido una de las principales causas de divorcio. Callar lo que sientes, aguantar para no generar problemas. Que cada conversación termine en pelea, no sentirte segura al expresar lo que sientes, etc.

Abuso

Ya sea físico, emocional o psicológico. Esta es una razón de peso para divorciarse, simplemente no hay forma de que la relación mejore y siga. Tu seguridad es prioridad.

Hijos

Sí, aunque suene duro, la paternidad es una de las razones por la que las parejas se divorcian. Tener hijos cambia por completo la dinámica familiar y de pareja. El estrés, el darse cuenta que las cosas no son color de rosa, pueden socavar una relación.

Problemas en la intimidad

Que la intimidad no sea satisfactoria o que esta ya no exista en la relación, es una poderosa razón por la que las parejas deciden seguir caminos separados.

Problemas personales

Ansiedad, depresión, traumas no resueltos, todo aquel bagaje emocional que traemos cargando todas las personas es aquel que si no se trabaja en terapia, tarde o temprano saldrá a la superficie y puede generar un divorcio.

Falta de tiempo de calidad

El exceso de trabajo, la presión de los hijos, la angustia económica y muchos problemas más pueden generar que las parejas no pasen tiempo suficiente y de calidad juntas. Y esto tarde que temprano afecta a grande escala.

Falta de respeto

Ya cuando la situación pasó de peleas a faltarse al respeto, la cosa no tiene vuelta atrás.

Perdida de individualidad

Que sean una pareja no quiere decir que sean uno mismo. Que compartan tiempo juntos no quiere decir que no puedan tener su propio espacio. Perderse en la relación a futuro trae muchísimos problemas y rencores que pueden desembocar en un divorcio.

Falta de equidad en labores de casa

Si ambos trabajan, ambos deben hacer las labores del hogar por partes iguales. El desequilibrio en las responsabilidades generará problemas que pueden llevar a la separación.

Ausencia de detalles

Los detalles son esenciales en una relación. Esos pequeños gestos que te hacen saber que te aman y que eres apreciadx son vitales. Perder el romanticismo y los detalles lastiman la relación.