Los espejos que a continuación te voy a mostrar salen de lo común a lo que estamos acostumbradas a ver. Estos se caracterizan por tener diseños, luces y colores que inevitablemente nos seducen y provocan que pasemos muchas horas frente a ellos sacando nuestro lado más chic y vanidoso… o bueno, ¡eso me sucedería a mí!
Si algún día soy millonaria, adornaré con ellos cada una de las habitaciones de mi casa. ¿Cuál te gustaría para tu habitación?
Con una habitación toda blanca, ¡este espejo se vería fabuloso!
Díganme cómo evitar no tener ganas de verte en él.
Para una casa minimalista no estaría nada mal.
Literal el espejo se derritiría con tu reflejo. ¡Qué mejor manera de subir tu autoestima!
Las luces de arriba le dan un toque bastante acogedor.
Si lo apagas ves tu reflejo, pero si lo prendes… ves otra dimensión. ¡Lo amé!
Este me da un poquito de miedo porque me recuerda al espejo de la película “El Aro”. Pero no faltará a quién si le pueda gustar, así que aquí lo dejo.
Si te gusta todo lo oscuro, checa este. Me llamó bastante la atención.
Para esas chicas elegantes.
¡Ufff! Este es mi favorito. Totalmente de celebridad de Hollywood.
¡Dan ganas de agarrarlo a mordidas!
¿Te imaginas haber tenido este espejo de niña? ¡Hubiera sido maravilloso!