Si terminaste el año aún de la mano de tu pareja, pero la idea de terminar ya venía rondando tu cabeza y estos primeros días del año cobró fuerza y la soltería llama poderosamente a tu puerta pero aún tienes dudas, entonces checa esto, porque saldrás de aquí decidida y segura de tomar la decisión.
Te molesta hasta que respire
Ya todo lo que hace te molesta, la forma en la que come, la manera en que te toca, que te respire cerca, etc. Ya no lo aguantas, pa acabar pronto.
Te trata mal
No hay respeto ni amor, te trata mal, te es infiel, te habla feo, hay violencia psicológica y/o física. Es decir, no eres feliz.
No confías en él
La confianza es el pilar de una relación sana. Si no existe, no hay de otra más que decir adiós.
Sientes paz cuando NO lo ves
Cuando no se ven te sientes tranquila, en paz y feliz. Esa es una enorme señal, así que no la ignores.
Terminan y regresan
Están metidos en un bucle en donde termina y regresan, terminan y regresan. ¡Páralo ya!
Quieres probar otras carnes
Ya andas queriendo ver lo que el mundo tiene para ofrecerte, experimentar otras cosas, probar otras carnes. Está bien, es normal, pero deja ya de engañarte a ti misma y mándalo a volar.
No te sientes libre
Estar en pareja no es igual a una sentencia. Estar en pareja no quiere decir que tengas que dejar de ser tú, descuidarte, pedir permiso y dejar de hacer lo que te gusta. Así que si no te sientes libre, ahí no es.
Van por caminos distintos
A veces el amor no es suficiente razón para quedarse con alguien. Podrán quererse pero si ambos van por caminos distintos y quieren cosas diferentes, decir adiós es lo más sano.