El problema con los dulces es que uno no los puede comer sin que la conciencia nos regañe. Sin embargo existe una forma de llevarlos muy cerca sin que te hagan daño, y esto es en forma de adorables aretes, por supuesto, hechos con arcilla.
Su creadora es la artista Katarzyna Korporowicz de Koko With Love, una increíble joyería con productos miniatura. El producto es resultado de un trabajo meticuloso para recrear a la medida delicias como pasteles, helados o cupcakes.
¿Se te antojaron? Conoce más sobre este exquisito proyecto aquí.