No tienen dinero ni para una papa sin sal, pero sí se quieren ver? Perfecto. Aquí tienes ideas para pasarla increíblemente ridículo, creativamente divertido y emocionalmente conectados, sin gastar un peso.
1. Cita de retos tontos
Ejemplo: “¿Quién consigue más cosas gratis en el centro?” o “¿Quién se toma una foto con más turistas?” Es adrenalina con presupuesto de estudiante y si no ligan entre ustedes, mínimo la anécdota da pa’ story.
2. Dibújense el uno al otro
El punto no es el talento, es ver qué tan mal te dibuja y usarlo de excusa para darle un beso de castigo.
3. Hacerse esculturas de plastilina uno del otro
Nada dice “te amo” como darte cuenta que tu pareja no sabe si tus ojos van en la frente o en la nuca. Arte moderno, bebé.
4. Improvisar cuentos
Pongan voz de narrador y échense un drama donde uno muer3 atropell4d* por un tamalero poseído. DRAMA MUCHO DRAMA
5. Cartas al yo del futuro (que probablemente también esté sin dinero)
Escríbanse cartas tipo “si todavía sigues con esta persona… ¿por?”. Luego entiérrenlas en una maceta random. Si florece algo, se casan.
6. Pintar en Starbucks
¿Quién necesita terapia cuando puedes dibujar árboles disociados mientras esperas a que les llamen por el café? Si no saben pintar, mejor. El cringe une más que las conversaciones profundas.
7. Jugar atrapadas
Corre. Ríe. Tropieza. Que alguien grite “¡me torcí el tobillo!” y ahí sepan si están listos para una relación seria o solo para el IMSS.
8. Pintar piedras como si fueran reliquias
Luego se las regalan. Y si terminan, se las avientan. Todo es útil!!!
9. Grabar un podcast falso donde finjan ser expertos en algo que no entienden
Tipo: “El lado espiritual de las croquetas de gato”. El cringe une más que los besos.
10. Maratón de pelis feas con comentarios tipo doblaje
Agarran la peor película que encuentren y se burlan como si fueran críticos de cine frustrados. Si se ríen juntos, hay química. Si no… pues mínimo no gastaste en boletos del cine.
11. Hacerse una coreografía de reggaetón viejito sin saber bailar
Si no les da vergüenza uno del otro después de eso, cásense o al menos vivan juntos en pobreza pero ridículamente felices.
12. Recrear fotos de pareja famosa
Versión pobre pero sincera. Luego comparan y lloran de risa o de autoestima.
13. Inventar un idioma secreto y hablarlo todo el día
Que los demás piensen que están locos. Spoiler: probablemente sí. Pero si funciona, es puro bonding emocional y psiquiátrico.
Estas citas no son para “conocerse mejor”. Son para exponerse sin filtro, para ver si juntos pueden convertir el aburrimiento en arte, el hambre en comedia y la vergüenza en vínculo.
Si después de esto se siguen gustando, ya tienen material para su libro de memorias. Y si no, mínimo no gastaron ni un peso… y se llevaron buenas anécdotas para el chisme.
