Nadie en esta vida se ha salvado de las flatulencias de su mascota, bueno, excepto los que no tienen una. Son tan horripilantes que es difícil creer que eso haya salido de una cosita peluda tan bonita. Estos perros ejemplifican a la perfección lo que sucede cuando deciden aflojar el intestino.
Jamás se arrepienten porque saben que los sigues amando.
1.Tomando selfies y él se tiró un gas.
2. Yo me echo gases cuando los niños me acarician.
3. Él haces esta cara cuando se echa una flatulencia.
4. Aparentemente el gas de mi perro huele rancio.
5. Adivina cuál de ellos se acaba de tirar un gas.
6. Mis pedos pueden hacer que tus ojos lloren.
7. ¡Oh por Dios! Mi boca estaba abierta.
8. Me asusto a mí mismo con mis gases.
9. Escuché un pequeño “Poot” y eché un vistazo.
10. No tengo idea de qué significa esta cara, pero la amo. Ella no sabe que el bebé se acaba de tirar uno bueno.
11. A mi perro le gusta dormir en mi regazo pero se echa gases constantemente en mi cara.
12. Mis gases suenan tan fuerte que me despiertan. Ok, parece que él sí se siente mal.