Decía mi abuela que cuando una mujer se sintiera triste lo mejor que podía hacer era trenzarse el cabello; de esta manera el dolor quedaría atrapado entre los cabellos y no podría llegar hasta el resto del cuerpo. Así que si hoy no te sientes linda o hay un apena en tu corazón, elige alguna de estas trenzas al azar y pon manos a la obra.
Ser feliz es una opción ¡Tómala!
Trata de conseguir unas ligas que sean transparentes para que no se vean en la trenza ya terminada. Recuerda que debes tener paciencia, tómalo como un reto e inténtala hasta que por fin te salga, después de un tiempo serás toda una master.
Una trenza normal, francesa u holandesa servirán de igual manera. El aspecto variará un poco pero todos lucirán divinos.
Y yo creyendo que la cosa era mucho más complicada. Sin duda esta trenza te pone de buenas porque te pone de buenas.
Si no tienes ganas de recoger todo tu cabello en una trenza, esta opción es sencilla y muy vistosa.
El estilo de la trenza depende de tu gusto, el verdadero secreto está en deshacerla con suavidad y cuidado para obtener algo así.
Recuerda tener a la mano lo necesario para que no sufras mientras trenzas tu cabellera. Trata de relajarte y concentrarte, verás que al terminar te sientes mucho mejor.
Es la trenza más curvilínea que verás. Su esponjosidad tiene algo que te hace suspirar.
El calor puede cambiar nuestro humor y recoger tu cabello de manera tan linda, puede evitarlo.
Muestra ese bello rostro que la vida te dio. No escondas ni por un segundo tu belleza natural.
