Yuya ha sido una leona celosa en cuanto a mantener la privacidad de Mar en el más riguroso de los secretos. Y la verdad es que está bien, su tranquilidad y la salud emocional vale más que la fama.
Y aunque no muestra su rostro, si nos permite ver por una mirilla su etapa como mamá. Y no sé si hoy se sentía con ganas de más, pero mientras alimentaba a su pequeño, decidió mostraron una pequeña parte de su rostro, su ojito cerrado que nos da un poco más de idea de cómo luce Mar. Sin duda me parece que es un niño divino.