Eres complicada. A veces tienes tantas paranoias que es casi imposible no odiarte. No te gustas porque no eres perfecta. Y sí, no lo eres, pero ¿quién lo es?.
Te quejas constantemente de tus defectos. Eres temperamental, insegura, un total contrasentido. Pero también eres la persona más sensible y dulce que conozco.
Te escondes detrás de cada sarcasmo, finges ser una perra, pero no lo eres.
Dices odiar el romanticismo y luego te pierdes dentro de un abrazo. Te encariñas fácilmente y das el corazón a aquellos a los que amas. Amas tanto, amas fuerte y nunca a la mitad. Y te quedas, incluso cuando no hay nada más por lo que luchar. Te quedas hasta el final, aun a costa de perderte a ti misma.
Así que, podría convencerme de odiarte, pero no puedo… Prefiero amarte.”
Gracias a: Un rincón maravilloso