Todo comenzó cuando en redes se filtraron unos supuestos mensajes entre Ricardo y su ex, Samii Herrera, y claro, internet hizo lo que mejor sabe: sacar capturas, teorías y memes más rápido que tu ex el precoz
El chisme resumido para las que no tienen tiempo pero sí curiosidad
Según los mensajes, Ricardo habría estado “coqueteando” con su ex Samii mientras ya andaba con Susana Zabaleta y no eran coqueteos inocentes tipo “¿cómo estás?”, eran del estilo “te extraño, me avisas cuando nos tomamos un café” no confirman nada “explícito”, pero sí tienen la energía del “me gustas todavía y quiero tenerte, pero que nadie se entere” y eso, reina, en 2025 se llama microinfidelidad
¿Y Susana?
No ha dicho ni pío, pero sabemos cómo es: no necesita dar entrevistas, solo subir una foto Fuentes cercanas (o sea, los comentarios de TikTok) aseguran que Susana ya se habría distanciado de Ricardo y que la relación está “en pausa”. Una pausa que suena más a “me bajo del barco y que se hunda solo”.
Y Ricardo?
Según dicen, ha borrado varios comentarios en sus redes. Porque claro, el internet no perdona y Algunos fans creen que todo fue malinterpretado, otros dicen que “cuando el río suena, mensajes lleva.”
Y aunque aún no hay comunicado oficial, el silencio de ambos pesa más que los mensajes que se filtraron.
Lo que más dolió (según Twitter y mi intuición)
No fue el supuesto engaño. Fue que todos pensábamos que Susana Zabaleta, diosa, bruja cósmica y mujer sin filtro, había domesticado al comediante más disperso del stand-up mexicano.Pero parece que el hechizo se rompió.
Si algo nos enseña este escándalo es que no existe mensaje que el universo (o un screenshot) no saque a la luz.
Y aunque Ricardo aún no confirma ni desmiente nada, una cosa sí es segura: está en modo “error 404, relación no encontrada”, Susana está en “modo diosa renacida”, y nosotros, como siempre, aquí por el drama y la actualización del capítulo siguiente.