Recientemente se puso de moda el juego “paranormal” llamado Charlie Charlie, en el cual invitas a un espíritu a entablar una conversación contigo, pero si crees que esas son cosas de niños, entonces tenemos unos “juegos” que te erizarán la piel.
Nota: Todos los puedes hacer sola o acompañada.
1. Bloody Mary.
– Apaguen todas las luces de la casa.
– Tomense de la mano y con cuidado diríjanse hacia el espejo más grande que haya en el lugar.
– Sin soltarse comiencen a repetir viendo fijamente al espejo : Bloody Mary (6 veces)
– Esperen a ver que sucede la sexta vez que terminen de decir Bloody Mary … Simplemente te digo algo… No te gustará lo que se reflejará en el espejo.
2. Fotografiando un espíritu de tu propia casa.
– Estando a solas apaga todas las luces y toma tu cámara (activa el flash).
– Para contactar con el espíritu, comienza a hablar en voz alta y retalo a que se haga presente.
– Ve caminando por toda la casa y antes de entrar a cualquier habitación pregunta : ¿Estás ahí?, espera 5 segundos y toma una fotografía.
– Si eres valiente, atrévete a ver lo que apareció en ellas.
3. Conecta tu alma por unos momentos con la de un muerto.
– Enciérrate en tu habitación y en tu cama siéntate con las piernas cruzadas, cierra los ojos y trata de poner tu mente en un absoluto color negro.
– Respira y exhala profundo durante 1 minuto (trata de relajarte para lo que viene).
– Intenta provocarte la sensación de sentir escalofríos por todo tu cuerpo (se dice que las personas que se pueden provocar a sí mismas esta acción, tienen una facilidad superior de conectar su alma con la de una persona muerta).
– Al mismo tiempo que te provocas esta sensación, sigue respirando lento y trata de ir imaginando un rostro en tu mente. El o ella es quien se quiere conectar a tu alma. Pon especial atención al sentimiento que te quiere transmitir (Felicidad, enojo, desesperación, etc…)
– Mientras más lo hagas, más fácil podrás entender el mensaje que te quiere dar.
– Se dice que si lo lograste, como prueba en la madrugada la temperatura del lugar cambiará inesperadamente por sólo un minuto. (No es peligroso, pero es muy cansado mentalmente).
4. Jugar a las escondidas con el espíritu de un niño.
– Compra una vela.
– Apaga absolutamente todas las luces de tu casa.
– En una puerta y viendo hacia ella cuenta hasta 13 y repite la frase : “te voy a encontrar”.
– Prende la vela y ve caminando lentamente por toda la casa.
– Si la vela se apaga, es que el espíritu del niño te encontró a ti y será su señal de que quiere volver a jugar.
5. Verte fijamente en el espejo.
– Frente a un espejo mira tu reflejo durante unos minutos hasta que a ti misma te de miedo la mirada que tienes.
Aquí no “invocas” a ningún espíritu, simplemente es muy curioso el miedo que tu misma te puedes provocar con la mirada.
Si te sabes algún otro, avísanos o cuéntanos alguna experiencia extraña que te haya sucedido.